El Ayuntamiento de Campos reconoce irregularidades pero defiende la actuación del concejal Sebastià Sureda

El Ayuntamiento de Campos ha reaccionado a la presunta trama de corrupción urbanística del concejal Sebastià Sureda que ha trascendido hoy con una firme defensa de "todas" las decisiones del Consistorio, que han contado con el "aval de los informes técnicos" y el "voto favorable y unánime" de todos los grupos políticos con representación en el pleno municipal.

En un comunicado tras la información avanzada por Diario de Mallorca, el Ayuntamiento ha asegurado que desde que tuvo conocimiento de la denuncia ha puesto en marcha "todos los mecanismos legales pertinentes" para "regularizar una situación que afecta a centenares de familias" del municipio. De hecho, el Consistorio ha afirmado que aunque la denuncia se interpuso en noviembre de 2020, las investigaciones no han empezado hasta el 5 de septiembre de 2023 "por una cuestión estrictamente administrativa".

Desde que en octubre de 2022 el Ayuntamiento recibió el primer requerimiento de la Oficina Anticorrupción "se han dado respuesta a todos y cada uno de los que se han recibido", ha afirmado la institución, tomando las "medidas oportunas" en forma de inspecciones, expedientes u otros.

Respecto a la denuncia de la Oficina, la corporación municipal ha lamentado (al igual que el Partido Popular) que la información haya trascendido "antes de que las partes" implicadas conozcan "el contenido de la investigación" destapada. En este sentido, el Ayuntamiento se ha preguntado si el organismo "actuará con el mismo celo y celeridad en otros municipios afectados por problemáticas urbanísticas de la misma índole" y ha expresado "perplejidad" ante el hecho de que "la única investigación en curso en 2023" es la que concierne a Campos y que "pone en juego la economía, el bienestar y el futuro laboral de los vecinos".

Por otro lado, el Ayuntamiento ha alegado que el pleno aprobó por unanimidad de todos los grupos municipales, incluidos Més y PSIB, el pasado 27 de junio, instar al Consell de Mallorca a suspender parte de la normativa vigente desde 1991, con lo que "quedaría solucionada la problemática" y se "garantizaría el futuro laboral de centenares de vecinos de Campos", ha señalado el Consistorio, sin que ello afecte a los expedientes sancionadores iniciados, la presentación de proyectos de actividad o incluso la "legalización de obras realizadas sin licencia no prescrita".

En cualquier caso, recuerda el Consistorio en el comunicado, los informes técnicos municipales "han dado por buena" la interpretación legal que permite el uso comercial en zonas en las que en 1991 no estaba prohibido, ya que según el informe técnico jurídico, el régimen de usos planteado hace más de 30 años "está totalmente desfasado". Esta interpretación, en palabras del Ayuntamiento, "da por bueno que los usos que no estaban prohibidos en zona de equipamientos, están permitidos como usos compatibles".