Saltan las alarmas en los hoteles: los trabajadores de las lavanderías de Baleares votan ir a huelga indefinida desde este martes
Los trabajadores rechazaron este fin de semana por mayoría la propuesta presentada por la patronal tras las reuniones en el TAMIB
Reclaman tener dos días libres y media hora para descanso, entre otras reivindicaciones, por lo que ven insuficiente la propuesta salarial
Los trabajadores de las lavanderías de Baleares han votado este fin de semana por mayoría no aceptar la propuesta de la patronal, después de que la semana pasada se acercaran posturas en la negociación del convenio. Así pues, este martes, a las siete de la mañana, arrancará la huelga indefinida que afectará a los hoteles del archipiélago justo en el inicio de agosto, con la ocupación de los establecimientos en su punto más alto.
Rechazan la propuesta presentada en el TAMIB, un salario base de 1.250 euros más asistencia y un 10 % de antigüedad. Exigen dos días libres y 30 minutos de descanso, entre otras medidas, informan CCOO y UGT.
La subida salarial ofertada inicialmente por la patronal de las lavanderías, 20 euros, fue rechazada por los trabajadores al considerarla insuficiente. «Sus condiciones son bastante precarias y los incrementos que se han puesto encima de la mesa» no están a la altura de la negociación, explicaba José Luis García, secretario general de CCOO en Baleares. Ante la falta de acuerdo la semana pasada se iniciaron negociaciones en el Tribunal de Arbitraje y Mediación de les Illes Balears (TAMIB).
Refrigerio de media hora y libranzas
Tras «demasiadas reuniones» con la patronal en la mesa de negociación del convenio del sector, CCOO Hábitat, UGT y el comité de huelga, junto con los trabajadores, votaron en días pasado por mayoría iniciar la huelga.«Los motivos son muy evidentes», se aseguraba en un comunicado ante la «insuficiente» propuesta de subida salarial por parte de la patronal.
CCOO y UGT demandaban la aplicación de la revisión salarial de 2022; pluses para todas las lavanderías; más incrementos salariales; la regulación de las categorías y ascensos —«no es de recibo que un trabajador esté más de diez o quince años en la categoría de peón o de auxiliar, todo para cobrar siempre la categoría inferior»—; dos días libres consecutivos semanales, una «línea roja» en la negociación»; cobro del plus de nocturnidad, días personales y tiempo de descanso y refrigerio de 30 minutos.
Si este lunes no se llega a un acuedo in extremis, el sector hotelero temblará ante el caos que puede suponer el desabatecimiento de toallas y sábanas, entre otras prendas en los establecimientos de Baleares. Hay que tener en cuenta que la mayoría de los hoteles tienen el servicio de lavancerías externalizado.
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