La expansión del mosquito tigre aumenta la posibilidad de una trasmisión de enfermedades tropicales en Balears

Ya se dio un caso el verano pasado en Eivissa cuando un insecto que picó a un viajero procedente de México con dengue trasmitió la patología a varios turistas alemanes

Imagen de archivo del doctor Miguel Ángel Miranda

Imagen de archivo del doctor Miguel Ángel Miranda / Massutí

I. Olaizola

I. Olaizola

El profesor del área de Zoología de la UIB Miguel Ángel Miranda alerta de que el riesgo cero no existe en este mundo globalizado y que la extensión del mosquito tigre por todo el archipiélago balear podría propiciar más casos de lo que los expertos conocen como trasmisión local. O, lo que es lo mismo, que el mosquito se convierta en vector y sea capaz de trasmitir enfermedades tropicales picando a personas que las padezcan y trasmitiendo el virus a otras personas que ni siquiera hayan viajado a los países donde esas patologías son comunes.

El doctor Miranda alerta de que esta comunidad ya ha registrado un caso de esta trasmisión local. Ocurrió el verano pasado en Eivissa cuando un mosquito tigre picó a un viajero procedente de México con dengue y trasmitió el virus a varios turistas alemanes a los que picó a continuación. Cuál sería su sorpresa al comunicarles sus autoridades locales que habían contraído el dengue, común en el Caribe, Centroamérica, Sudamérica, sudeste de Asia e islas del Pacífico… ¡tras regresar de una estancia en Balears!

«Hay que saber que existe un riesgo para saber evaluarlo y prevenirlo», sostiene el profesor universitario de Zoología advirtiendo que la aplicación Mosquito Alert, desarrollada en Cataluña hace más de diez años y que el propio Miranda ha contribuido a difundirla por Europa, «sitúa a Balears en un nivel de riesgo» respecto a estas trasmisiones locales por la masiva presencia del mosquito tigre en este archipiélago.

Esta aplicación, revela el experto, acaba de ser incorporada oficialmente al Plan de Prevención de Enfermedades Vectoriales del ministerio de Sanidad que, por ello, ha lanzado una campaña mediática bajo el lema Si te pica, notifica, con el objeto de valerse de los mensajes de la ciudadanía para determinar en qué puntos del país la actividad de estos molestos insectos es más intensa así como para poder detectar más precozmente la llegada de alguna nueva especie invasora. «Los entomólogos podemos toparnos con la presencia de una nueva especie por casualidad. Con esta herramienta y las notificaciones de los ciudadanos las posibilidades de detectarlas crecen», defiende.

Sobre las variedades de mosquitos asentados hoy en día en Mallorca que podrían ser trasmisores de enfermedades tropicales importadas, el profesor señala en primer lugar al mosquito común (Culex pipiens), que sería un vector idóneo para trasmitir la fiebre del Nilo occidental que produce encefalitis en equinos y humanos y que también puede afectar a las aves, su reservorio natural.

Dengue y chikungunya

Y al mosquito tigre, por supuesto, al que Miranda atribuye la potencialidad de contagiar no solo el dengue, sino también la enfermedad del chikungunya. «Existe una competencia vectorial entre ellos», sostiene.

Preguntado por último el experto sobre si hay algún mosquito en las islas capaz de trasmitir la malaria explica que hace años el paludismo no era extraño en Mallorca, sobre todo en los humedales de s’Albufera, y que el mosquito que lo trasmitía era uno del género Anopheles, totalmente diferente a las dos especies anteriores. «Pero desde hace años no lo hemos vuelto a encontrar, por lo que por el momento no habría riesgo de trasmisión. Pero en Biología las cosas no son estáticas, todo está en competencia, moviéndose», alerta recordando lo que ha provocado esta constante actividad y evolución con la aparición del nuevo SARS-CoV-2. 

Mosquito japonés

El mosquito japonés (Aedes japonicus) se detectó en España por primera vez en 2018, en Asturias, gracias a la aplicación Mosquito Alert. Pero el profesor Miranda se encontraba de vacaciones en Cantabria al año siguiente cuando, durante una excursión halló en un abrevadero de piedra de una ermita del Románico perdida en medio de un bosque unas larvas de esta misma especie. «Se ha hallado en esa zona, pero se desconoce su extensión. Prefiere vivir en zonas boscosas y es una especie invasora que procede de Asia. Aunque no es un fórmula 1 de la trasmisión puede llegar a provocar la encefalitis japonesa, la fiebre de Lacrosse, la del Oeste del Nilo, el dengue o la fiebre del valle del Rift, patologías todas ellas muy poco habituales por estas latitudes», señala el profesor Miranda reiterando su advertencia de que pese a ello, «peligro siempre hay». 

Lluvias y altas temperaturas, más mosquitos

El doctor Miranda responde con una máxima cuando se le pregunta cómo se presenta la temporada de mosquitos. «Siempre que llueva y se produzcan acumulaciones de agua y las temperaturas sean altas, aunque no demasiado porque el calor extremo no les va bien, habrá mosquitos».

«En días como hoy (a mediados de esta pasada semana), que se han producido lluvias y ya hace calor, las larvas de mosquito pueden completar su ciclo en tan solo una semana. Son estas condiciones las que determinan su presencia, por lo que son muy difíciles de predecir. Pero si sigue lloviendo y hace calor, habrá mosquitos», vaticina. 

Sobre la llegada de especies invasoras, Miranda que pueden llegar en cualquier medio de transporte porque sus huevos pueden pasar mucho tiempo sin agua. «También pueden venir en coche desde Barcelona tras coger el ferry», concluye. 

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