La guerra por unos complementos salariales para los trabajadores no sanitarios del Servei de Salut está en vías de solucionarse antes de que la sangre llegue al río. Si ayer los sindicatos convocantes -UGT, CC OO, CSI-F- de una serie de movilizaciones por la exclusión de este colectivo pedían la mediación del president Bauzá poco después de las once de la mañana, apenas una hora más tarde la portavoz del Govern, Núria Riera, sostenía que "esperamos llegar a un acuerdo antes de las convocatorias".

Desde el IB-Salut abonaron esta impresión al recalcar que "nunca hemos cerrado la puerta para que se negociara ampliar este plus de carrera ordinaria para el personal no sanitario". Y es que, como recalcaron las organizaciones sindicales que están echando este pulso al Ejecutivo autónomo en este último tramo de la legislatura, el coste de incluir al personal excluido inicialmente en este plus salarial ascendería a apenas unos trescientos mil euros desde la puesta en marcha de la carrera ordinaria, en el mes de octubre, hasta finales de año. Ínfima cantidad para una Conselleria que maneja un presupuesto para este ejercicio de 1.317 millones de euros.

Preparar un documento

Una fuente sindical señaló posteriormente que a primera hora de la tarde recibió una llamada de un alto cargo del Servei de Salut en la que se le emplazó a "ir preparando el documento" que permitiría al personal no sanitario percibir también este plus salarial.

A la espera de que las negociaciones lleguen a buen puerto, los tres sindicatos de clase anunciaron las siguientes concentraciones de protesta, todas ellas a las once de la mañana: el 6 y 22 de mayo en los hospitales de Son Espases, General, Psiquiátrico y Verge de la Salut; los días 7 y el 20 de mayo en Son Llàtzer y Joan March; el 12 y 19 de mayo en el hospital de Inca; el 11 y 19 en el de Manacor; en Can Misses el 14 y 21 de mayo; en Mateu Orfila los días 13 y 21 de mayo; en la gerencia de Atención Primaria el 15 de mayo y, por último, el día 18 del próximo mes ante los servicios centrales del IB-Salut.

Asimismo, recordaron que el próximo martes estaba previsto celebrar una asamblea conjunta en la que todos sus delegados decidirían, siempre que no haya un acercamiento de posturas, la convocatoria de paros. "Se contemplan varios escenarios, desde paros parciales a jornadas completas de huelga. Como mínimo, habrá varios paros parciales y hasta es posible que un día de huelga", precisó Miguel Ángel Romero, de UGT.

Guillem Vila, del CSI-F, recalcó que el acuerdo alcanzado el pasado miércoles también es perjudicial para el personal sanitario al no contemplar el tiempo sobrante por lo que, recordó, mientras a un médico le puede suponer cinco años alcanzar un nivel de este plus, a otro le puede implicar catorce años de servicios prestados. Y Romero recriminó al Sindicato Médico que por un lado haya firmado un acuerdo y por otro aconseje a sus afiliados que se consideren perjudicados por él a judicializarlo.

Asimismo, Manel García Beneyto, de CC OO, acusó a la coalición sindical de médicos y enfermeras de ser los responsables de que no se haya pagado este complemento salarial durante esta legislatura mostrando un documento de julio de 2011 en el que el Sindicato Médico reclamó al por entonces director general del IB-Salut (Juan José Bestard) que dejará sin efecto la convocatoria de fase ordinaria de este plus. Un parón que, cifró Miguel Ángel Romero, ha permitido a la Administración ahorrarse 45 millones durante estos años por este concepto.

Ajena a estas disputas, la portavoz del Govern aseguró que la falta de acuerdo para la aplicación de la nueva carrera ordinaria a los empleados públicos no sanitarios del IB-Salut responde a demoras de "tramitación" que están en vías de resolverse.