Tenis

El alarmante descenso de Rafa Nadal en el ránking: del 2 al 662

El mallorquín sufre la mayor caída en una temporada en la que solo ha jugado el Abierto de Australia

Nadal, en la rueda de prensa en la que anunció su retirada temporal de las pistas.

Nadal, en la rueda de prensa en la que anunció su retirada temporal de las pistas. / Efe

Ricard Cabot

Ricard Cabot

Rafa Nadal prosigue su lucha por regresar a las pistas de tenis, prácticamente un año después de disputar su último partido (el 18 de enero en la segunda ronda del Abierto de Australia ante el norteamericano Mackenzie McDonald). Para ello, en lo que a priori debe ser el último de su prolífica carrera deportiva, se entrena en su academia, donde en las últimas semanas ha intensificado su preparación para intentar llegar con aspiraciones de sentirse competitivo en el primer grande del año, en enero de 2024 en Melbourne, el escenario de su lesión.

El tenista mallorquín sigue bajando puestos en la clasificación mundial. En la lista de este 6 de noviembre, día de actualización en el ranking ATP, Nadal ha descendido hasta el puesto número 662 después de perder 210 puntos por no comparecer al Masters 1.000 de París, que el domingo se adjudicó el serbio y número uno Novak Djokovic.

Nadal se duele de la cadera en la última edición del Abierto de Australia.

Nadal se duele de la cadera en la última edición del Abierto de Australia. / Reuters

Ahora solo cuenta con un total de 45 puntos en su casillero, los de la segunda ronda de Australia. Descontó de golpe 240, acumulados el pasado curso: los 10 de su participación en el indoor de París y los 200 de un triunfo en las ATP Finals de Turín. De 255 puntos a 45, que mantendrá hasta finales de enero de 2024. Sufre de este modo el mayor descenso, perdiendo más de 400 plazas. Más que cuando entregó los 2.000 de Roland Garros, cuando bajó de la plaza 15 a la 136, o causó baja en el US Open y descendió 180 peldaños, hasta el 239.

Su regreso se producirá por invitaciones o por ránking protegido, lo que le obligará a jugar en las primeras rondas de los torneos con los mejores del circuito

Aunque tenga aseguradas las 'wild cards' (invitaciones que se reservan los torneos para invitar a ciertos jugadores) de los próximos campeonatos, o ya sea mediante ránking protegido (el puesto que ocupaba al comenzar la larga baja médica) podría exponerse a rondas muy complicadas en las que posiblemente se enfrentaría a los tenistas que están dentro Top 10 del ranking mundial, y con muchas opciones de hacerlo ante Djokovic o Alcaraz, los dos primeros de la clasificación.

Nadal empezó 2023 como número dos mundial, pero la lesión sufrida en aquel fatídico 18 de enero en el psoas-ilíaco de su pierna izquierda frustró todas sus esperanzas de realizar una buena temporada.

Un año para olvidar

2023 será un año para olvidar en la larga trayectoria de Nadal como tenista. Nada más sufrir la lesión, que en aquel momento desconocía, ante McKenzie, desolado, dijo en la rueda de prensa que "el vaso está llenándose y en algún momento el agua puede salir fuera. Estoy cansado, triste y decepcionado". 

Al día siguiente se sometió a una resonancia magnética, que detectó una lesión de grado 2 en el psoas ilíaco de su pierna izquierda. El pronóstico de baja se estableció entre seis y ocho semanas. El 20 de marzo salió del 'top ten' por primera vez después de 18 años (912 semanas, 6.538 días) tras ingresar entre los diez mejores el 25 de abril de 2005.

Tras renunciar al Godó, el 20 de abril hace lo mismo en Madrid, no pone fecha a su vuelta e inicia un nuevo tratamiento para recuperarse de la cadera. "La lesión sigue sin curarse y no puedo trabajar lo que necesito para competir", afirma en un comunicado. 

Después de darse de baja de Roma, el 18 de mayo anuncia en su academia su ausencia de Roland Garros y que se retira temporalmente "para preparar el que creo que será el último año de mi carrera". "No merezco terminar así, me esforzaré para que mi final sea de otra manera", dijo, para añadir: "La decisión de no seguir jugando no la he tomado yo, la ha tomado mi cuerpo, que ha dicho hasta aquí". "Intentaré que mi último año no sea de comparsa, pero, aunque soy una persona positiva, tampoco soy iluso", en referencia a las dificultades que da por hecho que encontrará cuando su regreso a las pistas sea una realidad. "La lesión no ha evolucionado como quería, a lo mejor se tomó una decisión equivocada", concluyó. Era la segunda vez que se ausentaba de Roland Garros, el torneo que ha ganado catorce veces, tras 2004 por una fisura en el codo. 

Quince días después Nadal es sometido en la clínica Teknon de Barcelona a una pequeña intervención en el psoas ilíaco de su pierna izquierda por los doctores Marc Philippon, canadiense, referente mundial en lesiones de cadera que ha operado a Kuerten, Hewitt y Raonic; Jaume Vilaró y Ángel Ruiz Cotorro. La previsión era de cinco meses de baja tras una intervención que consistió en una artroscopia para limpiar las zonas fibróticas y degeneradas del tendón. Se aprovechó para regularizar una lesión antigua del labrum de su cadera izquierda (de la cavidad del hueso coxal de la articulación, que actúa como un sello o junta de goma que ayuda a sujetar bien la cabeza del fémur) que, según los médicos, "con toda seguridad ayudará a la mejor evolución del tendón". La intervención duró dos horas y media. Tras diez días de reposo, empezó a hacer bicicleta y natación, sin forzar cargas.

Dolor controlado

Pasó todo el verano, con la victoria de Djokovic en Roland Garros y quedándose como líder en solitario de títulos de Grand Slam, con 23, superando los 22 de Nadal. Hasta que el 18 de septiembre, en una entrevista en Movistar, se sinceró sobre cómo se veía y sus opciones de regresar. Dejó algunas frases que reflejan cómo se siente: "Muchas veces me cuesta bajar la escalera de casa por las mañanas"; "veo muy poco tenis por pura desconexión, vi las finales de Wimbledon y el US Open"; "vivo con un dolor controlado que no me amarga la vida, ya que tengo un pie muy mal y no me deja vivir tranquilo"; "no soy un iluso, sé a las dificultades a las que me enfrentro, una la edad, y la otra los problemas físicos que no me dejan entrenar al cien por cien habitualmente. Entreno 40 minutos en pista tres días por semana, más gimnasio", dejó como perlas.

El pasado 19 de octubre, en Madrid, fue la última vez que explicó cómo se siente: "Sigo con dolor"

El 19 de octubre fue la última vez que dio señales de vida. En la presentación en Madrid de la NDL Pro-Health, proyecto empresarial en el que tiene como socio a Cantabria Labs, deja en el aire su regreso en Australia. "Sigo con dolor", afirma. "No estoy en condiciones de confirmar lo que pasará con mi cuerpo en unos meses", afirma. "Estoy entrenando lo que el cuerpo me deja, más ahora que hace un mes", concluyó. Hasta hoy. Quedan poco más de dos meses para el inicio del Abierto de Australia. Bastante antes se saldrá de dudas, si reaparece o retrasa su vuelta a las pistas.