Fútbol

Fallece el padre de Olga Carmona, la autora del gol que hace campeona del mundo a España

La jugadora conoció la muerte de su padre tras concluir la final del Mundial

Olga Carmona adelantó a España en la final del Mundial.

Olga Carmona adelantó a España en la final del Mundial. / EP

Laia Bonals

El día más feliz de la vida de Olga Carmona acabó siendo el más cruel. La joven futbolista, que anotó el gol decisivo que ha convertido a España en campeona del mundo, conoció la noticia del fallecimiento de su padre una vez concluida la final del Mundial, tal y como ha comunicó en la noche de este domingo la Federación Española de Fútbol.

El padre de Olga Carmona murió horas antes de la final, pero la familia decidió no contárselo a la jugadora para que pudiera disfrutar del partido. Su madre y sus hermanos, que viajaron este sábado hacia Australia para acompañarla en la cita, lo hicieron juntamente con la psicóloga personal de la futbolista. No quisieron que Olga se perdiera el partido más importante de su vida y, tanto sus familia como amigos optaron por no darle la dura noticia antes del encuentro de su vida. Una vez concluyó la celebración fue cuando le comunicaron la noticia.

Precisamente Olga, tras su gol, protagonizó uno de los momentos más emotivos de esta final. La sevillana se levantó la camiseta mostrando el nombre de "Merchi", en honor a la madre de una amiga que también había fallecido recientemente. Quería mostrar su apoyo y reconfortar a la familia tras la pérdida.

Golpe duro en plena euforia

"Mandamos nuestro abrazo más sincero a Olga y a su familia en un momento de profundo dolor", comunicó la Federación, que cerró su nota con palabras para la artífice del título mundial español. "Te queremos, Olga, eres historia del fútbol español", concluyó el texto.

El gol de Olga Carmona le ha valido un Mundial a España. Un tanto que ahora, es más importante que nunca. Vale por los sueños de las niñas, por la lucha de sus compañeras que ya no están y para honrar al padre de la futbolista sevillana.

Esa niña que estudiaba flamenco a la vez que descubría el deporte a través de la natación, el tenis y el fútbol. La futbolista, que tantas veces había pasado desapercibida, que creció en un mundo hostil. Olga Carmona, la estudiante de Ciencias de la Actividad Física y el Deporte, que juega de día y estudia de noche, hizo sobre el tapete del estadio de Sídney lo que mejor sabe hacer. Magia.

Desde el gol, Carmona no perdió la sonrisa. Cuando pitó la colegiada en el minuto 113 empezó a correr. El tiempo extra se hizo eterno, pero cuando el silbato resonó entre las paredes del Accor Stadium en Sídney, las lágrimas empezaron a brotar. Abrazos y besos. Saltos, cánticos y fotografías. Una vez más, Carmona era la protagonista. Habían hecho historia, y no solo por ellas. Por las que viajaron a Australia y Nueva Zelanda y por las que no. Por las que se plantaron, las que discutieron y lucharon. Por las que han llegado de nuevas y han sumado fuerzas. También por las que vendrán, que ven que no es solo un sueño, sino una realidad.

Ahora, también ha hecho historia por su padre, a quien ha tenido que despedir antes de tiempo.