La plaza situada frente al edificio municipal de Playa de Muro acogió la noche del sábado una cata para los amantes de la enología. Así, doce bodegas procedentes de diferentes puntos de la isla presentaron sus productos en la IV edición de la cata de vinos organizada por la agrupación hotelera de Playa de Muro.
Los asistentes, por un módico precio, podían optar a una degustación ilimitada y, además, tomar un tentempié a base de productos típicos elaborados por la conocida marca inquense Quely.
Pero, los participantes no solo probaron vinos, sino que además pudieron aprender sobre ellos, pues los bodegueros explicaban sucintamente la elaboración e historia del producto a todo aquel que se acercaba.
Joana Mª Sáez, gerente de la agrupación hotelera, afirma que la afluencia de este año ha sido la mejor con diferencia. De hecho, a pesar de que en el programa constaba que la hora de cierre serían las 21.30, a las 22.15 algunos todavía se resistían a marcharse.
