El alcalde Jaume Bauçà y todo el PP de Montuïri tenían previsto ayer aprobar en pleno el abono de parte de la paga extra de Navidad a los funcionarios locales. Pero la presión sindical hizo que lo que parecía seguro por la mañana ya por la tarde quedara "encima de la mesa" por temor a posibles irregularidades en el sistema para llevar a cabo el abono.

El Ayuntamiento quería, basándose en un informe de la Defensora del Pueblo, ingresar en las cuentas de sus empleados la parte proporcional de paga extra procedente de las cotizaciones que iban desde el uno de junio (un día después de que se abonara la paga extraordinaria de verano) hasta el 15 de julio, cuando se publicó el decreto estatal que anulaba dichos emolumentos para todos los funcionarios estatales.

Pero entonces el sindicato STEI sospechó que detrás de ello podía haber un trato de favor por parte del Govern, y en concreto de la directora general de Función Pública del Govern y antigua secretaria del ayuntamiento montuïrer, Núria Riera, para amparar lo que en los demás ayuntamientos de la isla no está previsto.

El sindicato, pese a reivindicar el pago del 100% de la paga para todos los funcionarios, criticó el hecho de que el PP de Montuïri abonara un 25% de ella haciéndose valer de la influencia de, en teoría, una de sus miembros de junta local, la propia directora general.

"Ni se trata del 25% ni Riera forma parte de la junta del PP de Montuïri; puede que esté empadronada aquí pero está afiliada en Palma", corregía el alcalde, "simplemente nos queríamos basar en un informe legal, pero está comprobado que a veces los sindicatos presionan y actuan más como un partido político que otra cosa, con lo cual no lo aprobaremos y lo dejamos por el momento encima de la mesa hasta que Delegación de Gobierno nos informe". Las cantidades finalmente frustradas oscilaban entre los 200 y 300 euros, dependiendo sobre todo de la antiguedad de cada trabajador de la corporación.

El STEI remarcaba en su nota de prensa que "en los momentos actuales es más necesario que nunca que las personas que se dedican a la política, tengan un comportamiento honesto y coherente" en referencia a Riera.