Investigan a la propietaria y la inquilina de una yurta ilegal por el primer gran incendio de la temporada de Ibiza

La Guardia Civil investiga a dos mujeres de nacionalidad española, la propietaria del terreno donde se originó el fuego y la actual inquilina de una yurta instalada en el mismo con anclajes en el suelo, como presuntas culpables del incendio forestal que tuvo lugar el pasado miércoles, 3 de abril, en el Puig d'en Cardona, en Sant Josep.

Agentes del Seprona de la Guardia Civil de Ibiza y de Medio Ambiente de la conselleria de Agricultura, Pesca i Medi Natural, determinaron el punto de inicio del incendio tras su extinción y vieron que coincidía con una zona donde se habían vertido cenizas y rescoldos de una estufa de leña, según informa la nota de prensa del cuerpo de seguridad.

El Seprona concluyó, tras someter el área a examen, que el siniestro podría haberse originado a partir de uno de los vertidos de ascuas que había en el suelo.

En el lugar, considerado Suelo Rústico Protegido y Área Natural de Especial Interés de Alto Nivel de Protección, así como de prevención de riesgos de incendios, los agentes hallaron una tienda de campaña tipo yurta de grandes dimensiones, con una estufa de leña y una construcción de madera equipada con luz y varias bombonas de gas que servía de cocina, y un anexo del mismo material habilitado como baño.

Toma de declaraciones

La vivienda, de carácter ilegal, se alquilaba a una mujer que fue imputada por los agentes del Seprona por un supuesto delito de incendio por imprudencia y otro contra la ordenación del territorio.

Los agentes llevaron a la mujer, y también a la propietaria del terreno, que está siendo investigada por un delito contra la ordenación del territorio, al cuartel de la Guardia Civil para que prestaran declaración sobre el caso.

Las construcciones en el área forestal carecen de licencia del Ayuntamiento de Sant Josep, según informan desde el instituto armado.