Míriam, policía local de Palma, relata la asistencia a un hombre a punto de saltar desde un puente: «Había mucha presión»

«Cuando un servicio así acaba bien la sensación es muy gratificante»

Una agente en la sala del 092 de la Policía Local de Palma.

Una agente en la sala del 092 de la Policía Local de Palma. / Policía Local de Palma

Xavier Peris

Xavier Peris

A las ocho de la tarde del pasado 30 de enero un testigo alerta al 112. Hay una persona en el puente de la calle Joan de Saridakis que cruza la autopista de Andratx, que aparentemente pretende saltar al vacío desde unos veinte metros de altura. Tras recibir el aviso en la sala del 092, la Policía Local moviliza de inmediato sus unidades más próximas. En cuestión de minutos los primeros agentes en llegar confirman la emergencia. La persona está en el exterior de la barandilla y parece a punto de caer sobre la autopista.

«Enviamos unidades tanto a lo alto del puente como a la autopista, para cortar el tráfico, porque hay que valorar también la seguridad de los conductores que pasaban por debajo. Al mismo tiempo un compañero se puso en contacto con la Guardia Civil para que enviaran dotaciones de tráfico y otro solicitó la intervención de un psicólogo y una ambulancia del 061». Míriam es una joven agente de la Policía Local de Palma que aquella tarde estaba de servicio en la sala del 092, y se encargó de coordinar todas las patrullas que intervinieron. «Desde ese momento en la sala mantuvimos informados a todos los agentes que intervenían en la emergencia de lo que hacían las otras unidades».

"Queda la senasación de que el servicio ha salido bien"

Fueron veinte minutos que, para Míriam, «pasaron muy rápido. Había mucha presión que tienes que saber controlar».

Míriam destaca que en estas actuaciones es fundamental el trabajo en equipo, en el que cada uno se encarga de una cosa, pero todos actúan de forma coordinada. Finalmente, el agente que se acercó al hombre en lo alto del puente se ganó su confianza, consiguió entablar un diálogo con él y convencerle para que volviera al interior del puente.

«En ese momento te queda la sensación de que el servicio ha salido bien y la sensación es muy gratificante. Yo lo primero que hice en ese momento fue tomarme una tila», comenta. «Pero no hay mucho tiempo para valorar lo que ha pasado, porque enseguida entraron nuevos servicios que había que atender».

No estás solo, no estás sola

Si tú o una persona que conoces está pasando por un mal momento, hay profesionales dispuestos a ayudarte. En el teléfono del 112, las personas que trabajan en la Sala de Emergencias podrán atenderte por teléfono las 24 horas y todos los días del año.

También puedes llamar a la línea de atención a la conducta suicida, marcando el 024. Es un servicio de alcance nacional (accesible desde todo el territorio nacional), gratuito, confidencial y disponible las 24 horas del día, los 365 días del año.

Hay otras asociaciones, como el Teléfono de la Esperanza, que también prestan su ayuda. Puedes llamar al 717 003 717 o 971 461 112.

La Asociación de Familiares y Amigos de supervivientes del suicidio (AFASIB) te puede atender marcando el número 657 716 340.

También puedes acudir a un centro de salud u hospitalario en busca de ayuda.