Fútbol. Copa del Rey.

Indignación entre los aficionados por la gran presencia de seguidores del Athletic en la grada del Mallorca: "Es una vergüenza"

Los seguidores bermellones se muestran muy críticos con los socios que vendieron entradas a los bilbaínos y exigen explicaciones al club tras lo sucedido ayer en La Cartuja

Los aficionados del Athletic ocuparon gran parte de la grada destinada a seguidores mallorquinistas

Los aficionados del Athletic ocuparon gran parte de la grada destinada a seguidores mallorquinistas / Pau Ferragut Massanet

Andrés Martínez

Andrés Martínez

Los aficionados del RCD Mallorca han mostrado su indignación después de que la grada hubiera una numerosa presencia de seguidores del Athletic en la final de la Copa del Rey disputada ayer. Según uno de los aficionados que se han puesto en contacto con este diario, sintió "vergüenza" al estar rodeado de hinchas del conjunto vasco. Su ubicación, en principio reservada para los socios y aficionados de los bermellones, se tiñó de rojiblanco a través de "una cantidad importante de seguidores del Athletic con sus camisetas y los símbolos distintivos".

En este sentido, tras hablar con simpatizantes del club bilbaíno, estos le explicaron que habían sido los propios socios del Mallorca quienes les habían vendido las entradas en su zona. Así, los aficionados mallorquinistas también exigen explicaciones al club sobre lo sucedido. Además, en la misma mañana del encuentro la Policía Nacional y la Real Federación Española de Fútbol recitifcaron su decisión y anunciaron que se permitiría que los hinchas del conjunto vasco pudieran lucir sus distintivos en el fondo mallorquinista de La Cartuja. Días atrás, sin embargo, el club vasco informó a sus socios de que no podían llevar nada que les identificara como athleticzales por motivos de seguridad.

Y es que la imagen en el campo dejó confundidos y enfadados a los seguidores bermellones. A pesar de que la zona estipulada para la afición rival era el Fondo Sur, la marea bilbaína ocupó prácticamente por completo las dos tribunas, por lo que se calcula que hubo más de treinta mil seguidores vascos, más de la mitad de la capacidad total del canpo, que es de 56.000.

Una indignación que han compartido muchos seguidores a través de las redes sociales, muy críticos con los socios que decidieron vender su entrada a aficionados del Athletic. "Todos estos socios que habéis vendido las entradas a los del Bilbao espero y deseo que no volváis a entrar en Son Moix, no os merecéis este escudo, es demasiado para vosotros, como se dice en Mallorca, ¡peseteros!", expresa un aficionado en la red social X (antes Twitter).

Tanto la Federación como el club han intentado poner trabas a la reventa, incluso los propios seguidores bermellones comenzaron a denunciar anuncios que detectaban en diversas páginas web, pero como se pudo comprobar en el campo, no tuvo el éxito deseado, a pesar del carácter nominal de las entradas.

De hecho, en el Fondo Norte, la parte alta estuvo prácticamente ocupada en su totalidad por camisetas del Athletic. Otro apunte que aportan varios de los mallorquinistas presentes en el estadio es que en ningún momento se les exigió presentar el DNI a su entrada al campo, que era una de las barreras establecidas para evitar la infiltración de seguidores del conjunto rival en la zona del otro equipo.

A pesar del gran papel de la afición bermellona desplazada al campo, fue inevitable verse acallados por momentos por los seguidores del Athletic. A pesar de ello, los mallorquinistas desplazados en La Cartuja ofrecieron una imagen para el recuerdo, apoyando a los suyos cuando más lo necesitaron y haciéndose oír.

Cabe destacar que la mayoría de aficionados que se infiltraron en la zona del Mallorca lo hicieron en la grada de preferencia, la zona donde las entradas se agotaron en apenas minutos de su publicación por parte del Mallorca. Así, los seguidores bermellones también exigen explicaciones al club respecto a lo sucedido en La Cartuja.

Entradas de la Federación

Por otro lado, los aficionados mallorquinistas también lamentaron que las entradas que quedaban en manos de la Federación estuvieran copadas en su mayoría por seguidores del Athletic. De esta forma, los seguidores se quejaron de que esta zona, en un principio neutral, estuviera ocupada en su mayoría por aficionados bilbaínos.