Aguirre se sincera tras el triunfo del Mallorca ante el Rayo: "Vi más cerca el 1-2 que el 2-1"

Javier Aguirre se mostró tan aliviado como autocrítico en la sala de prensa tras el triunfo ante el Rayo (2-1). «En la primera mitad estábamos demasiado nerviosos por la necesidad de ganar y vi un poco tenso al equipo. El juego no me gustó, teníamos mucha necesidad. No estuvimos bien con la pelota y tampoco sin ella. En la segunda parte se abrió el partido y el marcador nos dio mucha seguridad pero se nos acabó la gasolina y regalamos el empate. Vi más cerca el 1-2 que el 2-1. Otros días hemos merecido más la victoria, pero el resultado es bienvenido, nos da un respiro importante. Estamos en la guerra», reflexionó.

El entrenador del Mallorca desveló que se había planteado sentar a Muriqi, autor del gol de la victoria en el descuento. «Vedat estaba arriba muy solo, así que decidí (en la segunda parte) cambiar el sistema a una línea de cuatro con dos puntas que ya habíamos ensayado. Lo iba a cambiar, pero él me dijo que aguantaba los noventa minutos. Estoy contento por él, es un líder nato con y sin balón. Su espíritu de lucha contagia al equipo. En el fútbol hacen falta jugadores como él», remarcó.

Muriqi desata la locura ante el Rayo Vallecano en el minuto 92

Ventaja sobre el descenso

El mexicano insistió en que los seis puntos de ventaja respecto a los puestos de descenso son una buena renta, pero que no es definitiva. «En febrero no desciende ningún equipo. Ahora tenemos una buena ventaja, pero peores cosas hemos visto. Hay que seguir corriendo y luchando. Esto nos da un respiro importante, pero falta mucha Liga. Nos da una semana mucho más tranquila, eso sí. El esfuerzo ha tenido premio y nos vamos muy contentos. Nos merecíamos algo así, aunque no hemos hecho nada todavía. Falta mucho sufrimiento», señaló ante los periodistas.

‘El Vasco’ descartó hablar del criticado arbitraje del andaluz Munuera Montero, que llegó a desquiciar a la afición de Son Moix. «Es culpa nuestra molestar al árbitro, que hace su trabajo. Es una excusa muy baratita la de echarle la culpa al árbitro o a la suerte, el público puede hacer lo que quiera», finalizó.