El campo en lucha: La agricultura ecológica advierte que está «al límite»

Tres entidades que agrupan a 600 productores del archipiélago entregan un manifiesto en la Conselleria que incluye ocho demandas «urgentes»

Representantes de las tres entidades de agricultores ecológicos, este viernes en Palma.

Representantes de las tres entidades de agricultores ecológicos, este viernes en Palma. / Apaema

Joan Frau

Joan Frau

La Xarxa de Pagesos Ecològics de Balears, integrada por las asociaciones Apaema (Mallorca), Apaem (Menorca) y Apaeef (Eivissa y Formentera), que agrupan a unos 600 productores, se han concentrado este viernes en la sede de la conselleria de Agricultura para entregar un manifiesto conjunto en el que advierten que la payesía de Balears «está al límite» y que diferentes factores como el cambio climático, el exceso de burocracia, los sobrecostes de la insularidad o la presión humana en el suelo rústico «están provocando una desafección galopante de los productores que conduce, si no se pone remedio, a la desaparición» de la producción ecológica.

Las tres entidades han querido dejar claro que apoyan la Agenda 2030 y las estrategias Farm to Fork y Biodiversidad de la Comisión Europea. «No queremos dar ni un paso atrás en la normativa ambiental, la transición ecológica ni en el objetivo de reducir en un 50% la aplicación de fitosanitarios que cuestionaría la salud de las personas y del agroecosistema», expresan en el manifiesto que también incluye ocho demandas «urgentes y concretas» en beneficio del sector. 

El presidente y la vicepresidenta de Apaema han entrado en la sede de la Conselleria para entregar el escrito. No han sido recibidos por el conseller Joan Simonet.

Así, la Xarxa de Pagesos Ecològics de Balears reclama, al igual que el resto del sector agrario, «la reducción de la burocracia y de las gestiones administrativas impuestas en los últimos tiempos» y que «van en aumento con la nueva PAC». También exigen la «aceleración de la resolución de las ayudas y de los pagos pendientes que tiene el Fogaiba» y lamentan que «el campo no se para, pero la administración sí».

Los productores creen necesaria la aplicación de la Ley turística respecto al «consumo obligado de producto local en los establecimientos hoteleros» e instan a la Administración a «dar ejemplo» comprando producto ecolocal. Otras demandas son el trasvase del impuesto turístico hacia la actividad agraria para «hacer frente a los sobrecostes que padecen los payeses» y la aplicación de un «plan de choque» para parar el abandono de la actividad agraria y la falta de relevo generacional.

Por último, también piden la aplicación del decreto de sequía para sostener el ganado ecológico que incluya una planificación a medio y largo plazo par facilitar la adaptación del cambio climático, una moratoria de licencias para nuevas actividades impropias del suelo rústico como es el caso de viviendas e instalaciones fotovoltaicas y la presencia de una «voz agroecológica» en el sector agrario.