Sineu exhibe el espíritu de la mallorquinidad con su Fira dedicada a las 'matances'

Como viendo siendo tradición, el concurso de cerdos concitó el interés de los visitantes a esta muestra con una acentuada tradición ganadera

Iñaki Moure

Iñaki Moure

El atiborrado calendario anual de fires en la part forana toca a su fin, pero antes de rubricar el año una de las últimas grandes citas ha sido este domingo la Fira de Sant Tomàs de Sineu, en que el mundo matancer se exhibe en todo su esplendor, precisamente en las fechas en que proliferan las matanzas.

Como demostró ayer, esta feria conserva aún un aroma a épocas pasadas, con un marcado acento ganadero. Antiguamente, su finalidad, básicamente, consistía en vender capones y pavos para las fiestas navideñas.

Con los años, esa oferta se ha diversificado notablemente, con la inclusión de expositores de artesanía y productos locales (incluyendo la venta de decoración navideña), al tiempo que la afluencia de visitantes ha aumentado hasta convertir esta muestra en un clásico del calendario de fires.

En todo caso, las raíces ganaderas son las que predominan en esta feria.

Acento ganadero

De esta forma, los numerosos vecinos y visitantes que recorrieron la Fira pudieron disfrutar de exhibiciones de ca rater, ca mè y ca de bestiar, además de una muestra de caza organizada por la sociedad de cazadores de Sineu.

También hubo lugar para los diferentes certámenes, como los concursos internacionales de avicultura y de colombicultura de Sineu.

Pero, sin duda, el evento estrella de la jornada fue el concurso de cerdos cebados. Los actos festivos continuarán durante esta semana. El próximo jueves, la biblioteca acogerá la lectura de un cuento y un taller navideño, a partir de las 17 horas, mientras que el viernes le tocará el turno a la reflexión sobre el mundo turístico, con la presentación del libro de Joan Enric Capellà y una tertulia posterior, bajo el título: ‘Què vol ser Mallorca de gran? I quin rol hi ha de jugar Sineu?’.