Los vecinos y vecinas de Vilafranca de Bonany no salían este jueves de su asombro después de que la escultura del melón, instalada por el Ayuntamiento con motivo de la Festa i Fira del Meló del pasado mes de septiembre, quedase totalmente destruida. Al parecer, la causa no ha sido otra que la ola de calor, ya que las altas temperaturas habrían dilatado el relleno de la escultura hasta que la estructura no ha podido soportar la presión y ha reventado.
La escultura, realizada de forma artesanal, había sido cedida por un vecino de la localidad, en la que el melón es todo un símbolo. Según explica la revista digital Tot Pla, con este hecho «también se ha descubierto que el interior del melón estaba lleno de latas y material que el artesano había utilizado para rellenar la estructura».
Según explican, muchos vecinos se han asustado por el ruido que ha generado la escultura al reventar. Varios clientes de un bar próximo han sido testigos directos. Afortunadamente no han tenido que lamentarse daños personales porque en el momento del colapso de la figura no había nadie alrededor.