Fornalutx celebra este miércoles su fiesta más tradicional. Enmarcada en los festejos populares dedicados a la Mare de Déu, esta mañana se llevará a cabo una de las actividades que más gente congrega de su programa de fiestas patronales. El correbou, o también denominado ‘Baixada del bou, constituye la fiesta más genuina de Fornalutx que, pese a los vaivenes de la historia, con más de cien años de antigüedad y las protestas de grupos animalistas, se mantiene fiel a la tradición.

¿Qué hacer para no perdérselo? El correbou es muy matutino y a las 8 en punto de la mañana ya está todo a punto para que comience. A esa hora el lanzamiento de un cohete anunciará la suelta del animal. Pero no hay que temer, el animal va atado a cuerdas y con un grupo de voluntarios que lo dirigen por las calles del pueblo y, lo que es más importante, fruto de la regulación que emanó de la Ley de Bienestar Animal de Balears se trata de un buey tranquilo y manso.

El correbou se inicia en la zona denominada Es Maiol, en la parte más alta de Fornalutx. Llegar ahí en coche es imposible. Solo se puede hacer a pie. Desde ahí se inicia la ‘bajada’ hacia el centro del pueblo por las emblemáticas calles empedradas de Fornalutx. Entre otras pasará por las de Tramuntana, Es Vent o la calle de la Iglesia para hacer un alto en el camino junto a la fuente de la plaza de España. Ahí una joven de Fornalutx le colocará una corona de laurel y, tras este acto simbólico, el animal continuará su camino guiado por la calle Arbona-Colom para, finalmente, desembocar en la calle Sa Font. En esta calle se acabará el recorrido del animal cuando de nuevo entre en la jaula de madera transportada por un camión. El recorrido dura entre 15 y 20 minutos aproximadamente, dependiendo de las paradas que el animal vaya haciendo por el camino.

Ojo. Es importante saber que está prohibido acercarse al animal y mucho menos hacerle cualquier tipo de acto que pueda suponer un maltrato. Las centenares de personas, en su mayoría jóvenes de la zona, lo saben perfectamente y se ocupan de que el toro reciba un trato respetuoso.

Para quienes no son de Fornalutx o Sóller, tienen que saber que deberán madrugar si no quieren perderse la única fiesta de Mallorca en la que participa un animal. La falta de aparcamiento es un hándicap y lo mejor será estacionar el coche en las afueras de Sóller y acercarse a pie hasta el pueblo. Las vistas a las montañas y los cultivos de naranjas acompañarán al visitante en todo su recorrido.

¿Qué significado tiene esta fiesta?

El correbou tuvo sus inicios en el siglo XIX. De hecho hay constancia escrita de que así fue. Durante muchos años la población de la Serra lo tenía difícil acceder a la carne para comer. La de ternera, todavía más. Por eso en Fornalutx y otros lugares se organizaban en sus fiestas el correbou, un pasacalles en el que se acompañaba un toro que después se sacrificaba en el matadero. Su carne abastecía a la población y especialmente entre aquellos que habían contribuido a las fiestas.