Son Coletes ha sacado a la luz los restos de 54 víctimas de la represión franquista, cuatro de ellas, mujeres en esta segunda fase de las excavaciones en el cementerio de Manacor, una campaña que arrancó el 18 de octubre. Una vez finalizado el trabajo de campo se da paso a los análisis antropológicos, por ello, el Govern hace un llamamiento a los familiares para que participen en la recogida de muestras de ADN que se llevará a cabo en enero. Los 54 restos recuperados se suman a las 25 víctimas de la primera campaña de 2020 con cinco víctimas ya identificadas y retornadas a sus familias. En total, 79. Son unos resultados «muy satisfactorios». De hecho, así lo ha remarcado el vicepresidente del Govern Juan Pedro Yllanes: "Estamos hablando de 54 personas con sus respectivas historias y familias que fueron asesinadas por motivos políticos, por sus ideas y por defender la democracia». Asimismo ha asegurado que «el Govern continuará con esta tarea con el fin de garantizar el derecho a la verdad, el derecho a la memoria y el derecho a la reparación y reconocimiento de las víctimas».
El trabajo de campo de esta segunda fase ha finalizado con la localización de siete fosas, tres de las cuales son continuidad de las excavadas en 2020. Por ejemplo, en la fosa 3 se han localizado 15 individuos. Se trata de una fosa que en 2020 ya se localizaron a seis milicianos pero que ahora se han excavado doce metros más. En dicha zanja, los restos localizados se han hallado en dos grupos. Uno formado por diez individuos que se pueden relacionar con milicianos y otro compuesto por cinco víctimas, cuatro de las cuales, según las primeras observaciones antropológicas, son compatibles con mujeres. Una de ellas, seguro que es menor de 22 años.
En resumen, esta segunda fase de intervenciones ha permitido exhumar 38 restos de víctimas en posición original, más dos concentraciones de restos desarticulados que, según los cálculos de los expertos, habría 16 víctimas pero este número global de 54 víctimas podría aumentar con el estudio antropológico de los restos desarticulados.
A nivel de cultura material, entre los objetos personales recuperados hay llaves, plumas, diferentes tipos de calzado, unas gafas de sol y, excepcionalmente, una moneda de oro de 20 dólares americanos de 1904 y botones de puño de oro. Por ejemplo, los objetos recuperados en algunos individuos de la fosa 3 son de uso cotidiano pero por su indumentaria podrían ser milicianos que llegaron con el capitán Bayo. Asimismo, las mujeres tienen asociado algún objeto que podría ser identificado como vestimenta femenina.
