El cuarto día de excavaciones arqueológicas salieron a la luz en el cementerio viejo de Sant Joan los cuerpos de los tres vecinos de Maria de la Salut asesinados por miembros de la Falange en Puntiró en 1936 y posteriormente tirados a un pozo de una finca de Sant Joan, desde donde fueron trasladados finalmente al camposanto.

Memòria de Mallorca seguirá ahora el protocolo fijado: comunicar el hallazgo al juzgado para proceder al levantamiento de los restos. Asimismo, se prevé comprobar el ADN de los fallecidos (Joan Gual, Jaume Gual y Miquel Salom) con el de familiares directos.

La alcaldesa, Catalina Gayà (Assemblea per Sant Joan), explicó a primera hora de la tarde a este diario que se habían descubierto cuerpos de mujeres, y que los arqueólogos decidieron “cambiar la estrategia, en lugar de intervenir en una zona en forma de U, ahora hacer un cuadrado en el mismo ámbito”.

Hay que recordar que, en días anteriores, miembros de Memòria de Mallorca y del Ayuntamiento ya informaron de que se encontraron restos de personas enterradas directamente allí en 1918, año de la gripe. “Dichos restos serán cuidadosamente recolocados en la misma área ajardinada”, aseguraron.