Miquel Àngel Serra, regidor del PSM, sacó números: la grave deuda total del ayuntamiento de Llucmajor es de 55 millones de euros, "lo que significa 1.500 euros por habitante". Denunció al PP "descontrol del gasto" y que no se solucionen "los problemas reales". En este sentido, "los ciudadanos cada vez pagan más impuestos y reciben menos servicios". La subida del 12% del IBI, "una barbaridad". Advirtió que el municipio tiene ahora "3.118 personas paradas" y "el PP no demuestra que resolver esto sea una prioridad". Manifestó que "es urgente solucionar los problemas de aparcamiento en s´Arenal, es imposible estacionar, una locura, y se perjudica al comercio". También echó en falta "instalaciones deportivas, sociales y culturales" en la zona de urbanizaciones costeras. Y criticó que el presupuesto no reserve ni un euro a la reforma de la Playa de Palma-s´Arenal y que haya 12 regidores del PP con dedicación parcial, "del todo abusivo". Joan Jaume, del PSOE, afirmó que el presupuesto "está alejado de la realidad y no tiene consistencia", por lo que exigió, sin éxito, la retirada del orden del día. "El saneamiento que se hace no es serio", según él. Guillem Roig, edil de ASI, argumentó su voto en contra en el hecho de que "como siempre, el ciudadano mileurista es el afectado por la mala gestión política", mientras que Bernardí Vives, de Convergència, alegó que las cuentas previstas por el PP "no contemplan la realidad del pueblo". En su opinión, falta una mayor apuesta por la promoción turística; faltan también más informes técnicos; no se ha llevado bien el caso de la ´escoleta´ y la subida del 12% del IBI es "en las peores circunstancias".