Vecinos del Paseo Marítimo denuncian al Ayuntamiento de Palma por "vulnerar el derecho al descanso"

Varios residentes de la zona han decidido ir a los juzgados de manera particular

Imagen de archivo de la fachada del Ayuntamiento de Palma.

Imagen de archivo de la fachada del Ayuntamiento de Palma. / DM

Redacción

Varios vecinos del Paseo Marítimo han denunciado al Ayuntamiento de Palma de manera particular por la “vulneración de derechos fundamentales, como el derecho al descanso y la inviolabilidad del domicilio”, tal y como ha podido confirmar este diario.

La asociación de vecinos Barri Cívic de Santa Catalina de momento no se ha sumado a la denuncia. “Todavía no hemos dado este paso. No lo descartamos, pero todavía vamos por las buenas”, asegura la presidenta Esperança Lliteras.

La Federación de Asociaciones de Vecinos de Palma ha asegurado este viernes en un comunicado que los acuerdos de la Mesa por la Convivencia Ciudadana no van “en contra del sector de la restauración ni contra las terrazas”, pero sí contra “los excesos y las zonas saturadas en barrios residenciales donde los vecinos y vecinas han perdido el derecho al descanso”.

Este es el comunicado completo:

“Ayer, día 2 de mayo, se reunió la comisión del trabajo de la Federació d’AV de Palma que participó en la Taula per la Convivència Ciutadana.

Queremos dejar claro que no se trata de ir en contra del sector de la restauración ni contra las terrazas en general, pero sí contra los excesos y las zonas saturadas en barrios residenciales donde los vecinos y vecinas han perdido el derecho al descanso. También queremos dejar claro que no se trata de un problema nuevo y que el movimiento vecinal lleva muchos años en lucha es estas problemáticas, pero que el hecho que sea un problema antiguo no significa que esté justificado, sino que más bien es un indicador de la falta de voluntad política de los diferentes gobiernos institucionales para encontrar soluciones y armonizar los derechos de los residentes con el derecho al negocio, que no se puede hacer a costa de la salud de la ciudadanía que habita en los barrios ni de la privatización de los espacios públicos.

Acordamos:

1- Solicitar una nueva reunión de la Taula, que preside el Alcalde con los departamentos correspondientes para la primera semana del mes de junio, entre otros tenemos pendientes respuestas por parte del Ayuntamiento en algunos de los temas que tratamos en la última reunión que fue a finales del mes de febrero:

- Plan especial de mejora para Santa Catalina, como experiencia piloto, incluyendo la adquisición de licencias de establecimientos que se cierran.

- QR a los establecimientos para conocer el contenido de las licencias y poder valorar el nivel de cumplimiento.

- Datos generales sobre el nombre de sanciones y el nivel de ejecución, reincidencias, etc. para poder saber los efectos.

- Situación y trabajo realizado sobre la lista de puntos conflictivos que en su día libramos las asociaciones al Ayuntamiento.

- Situación de cámaras en zonas conflictivas.

- Mantener Santa Catalina-Jonquet y ampliar las zonas a incluir en el refuerzo policial del verano.

2- Estudiar la nueva Ordenanza Cívica para valorar el que nos afecta en esta materia y hacer alegaciones con la participación de las asociaciones vecinales.

3- Pedir al Govern Balear que incluya a la Federació d’Associacions de Veïns de Palma en las negociaciones sobre el decreto del turismo de excesos, el cual se está negociando con las asociaciones hoteleras, pero en la que queda excluida la ciudadanía que es la más afectada.”

Temor por las terrazas en el Paseo Marítimo

El pasado 20 de abril siete bares del Paseo Marítimo celebraron la vuelta del ocio nocturno y las terrazas tras quince meses de obras. “Hubo más ruido que nunca, tenemos sonómetros puestos y las mediciones llegaron a alcanzar los 100 decibelios”, explicó a este periódico la semana pasada el presidente de la Asociación de Vecinos del Paseo Marítimo Antonio Ruiz. La asociación está trabajando en la elaboración de un informe a partir del ruido captado por los aparatos que tienen instalados.  “Además de hacerlo público, lo enviaremos al Ayuntamiento”, aseguró.

Los vecinos de la zona tienen un sentimiento encontrado con la reforma de todo el bulevar bañado por la bahía de Palma. Las aceras más anchas invitan a una sobreocupación de la vía pública por parte de bares y restaurantes. “Es lo que estamos viendo ahora mismo. La Autoritat Portuària estableció unos límites, pero ahora mismo no están marcados sobre el terreno”, contó Antonio Ruiz. “Hay un verdadero descontrol con las terrazas que esperemos que desaparezca cuando se instalen los paravientos, en septiembre u octubre, que es cuando quedarán establecidos los lindares”, indicó. “Ahora hay una especie de barra libre. Además, cuando recogen las terrazas, dejan las sillas y mesas amontonadas en la calle, no las guardan en el local, algo que no pueden hacer”, agregó.