Semana Santa en Mallorca: Fervor en Palma en la procesión de la entrada de Jesús a Jerusalén

Este Domingo de Ramos la cofradía la Mare de Déu del Carme de Pòrtol, la invitada en el desfile que ha partido de la iglesia de Sant Jaume en Palma

Semana Santa en Mallorca: así ha sido la procesión de Domingo de Ramos en Palma

Guillem Bosch

Myriam B. Moneo

Myriam B. Moneo

La iglesia de Sant Jaume se ha convertido este domingo en el centro neurálgico para dar rienda al fervor religioso en un Domingo de Ramos que tras la procesión de las palmas encabezada por el obispo de Mallorca, Sebastià Taltavull, ha seguido por la tarde, desde las seis, con la celebración del desfile que homenajea la entrada de Jesús a Jerusalén. Está previsto que termina entrada la noche, sobre las diez.

Esta Semana Santa en la que se celebra el final de la Cuaresma marcado por un periodo de penitencia ha empezado con todo el esplendor que caracteriza a las treinta y tres hermandades Palma.

A los pasos y los penitentes de Ciutat se unieron en esta ocasión los cofrades de la Mare de Déu del Carme, de Pòrtol, los invitados de la part forana. Ellos han sido los que han tenido el honor de encabezar la procesión y desfilaron detrás de la Policía Montada de Palma y los Tamborers de la Sala. 

La hermandad de la Mare de Déu del Carme, de Pòrtol, invitados en el desfile de este domingo.

La hermandad de la Mare de Déu del Carme, de Pòrtol, invitados en el desfile de este domingo. / Guillem Bosch

Tras la cofradía de Pòrtol en segundo lugar marchaban los nazarenos de la Hermandad y Cofradía de Nuestro Padre Jesús de la Humildad y Nuestra Señora de la Paz. La congregación castrense del barrio de Son Cladera es la más joven en ciudad. 

Sillas y dulces

Cerraba la procesión la Cofradía de Sant Jaume, una de las más antiguas, que ha tenido el honor de presidir la marcha que partió de su parroquia.

Entre los asistentes a la procesión no han faltado los que, precavidos, se han llevado sillas para hacer más placentera la espera mientras van desfilando las hermandades, con los descansos que necesitan los costaleros que cargan con los pasos. También se han hecho presentes los dulces, para endulzar la tarde a los más pequeños que han acudido con sus progenitores y abuelos a la marcha religiosa que todavía sigue recorriendo el centro histórico.

Una pequeña cofrade reparte piruletas entre niños del público.

Una pequeña cofrade reparte piruletas entre niños del público. / Guillem Bosch

El recorrido ha arrancado por la calle Sant Jaume. Ha seguido por la plaza de Santa Magdalena, la calle del Jardí Botanic, Costa de la Sang, la Rambla, la calle de la Riera, la calle Unió, la plaza del Mercat, la calle Unió, la plaza del Rei Joan Carles I, el paseo del Borne, la calle de Sant Feliu, la calle de Sant Gaieta y finaliza en la iglesia de San Cayetano