Otro hotel junto al Palau de Congressos de Palma: un caramelo goloso dado el auge del sector

Aun sin moratoria en Baleares, con la normativa urbanística de Palma Zafiro solo podría dedicar el 30 % de su solar a uso turístico.

Aun sin moratoria en Baleares, con la normativa urbanística de Palma Zafiro solo podría dedicar el 30 % de su solar a uso turístico. / Guillem Bosch

Myriam B. Moneo

Myriam B. Moneo

Una de cada tres plazas hoteleras en Palma están en manos de Meliá. También es de esta cadena el único establecimiento aledaño al Palau de Congressos. Un espacio en plena efervescencia por la fuerza de turismo de negocios y el auge que va cogiendo Ciutat como sede para albergar reuniones, incentivos, congresos y exposiciones (MICE por sus siglas en inglés). 

En Palma, recuerdan fuentes conocedoras de la legislación urbanística, no había normativa sobre los hoteles. Se temía que Nou Llevant se podía convertir en otro destino turístico, con hasta 10.000 plazas. Por ello en 2019, con la modificación del PGOU, se limitó que solo se podía destinar a uso turístico el 30 % de las parcelas de uso terciario (hotelero, comercial y administrativo). Fue «la fórmula que se encontró» para que ni desde Bruselas o los tribunales superiores se «tumbara» la normativa del Ayuntamiento en manos de los progresistas. 

Si Zafiro, el grupo propietario del solar junto al Palma Bay, desarrollara con la normativa municipal actual un hotel se quedaría en un establecimiento pequeño.

Sirva de ejemplo que el hotel de Meliá cuenta con 268 habitaciones (536 plazas). Hay que recordar que inicialmente en el proyecto del Palau, en 2005, para disgusto de los hoteleros, solo tenía 144 habitaciones.