Andalucía, Aragón o Castilla y León adelantan a Baleares en competitividad

Las isla se sitúan en la posición 153 en el ranking global de 234 regiones europeas, según la fundación Impulsa que dirige Antoni Riera

El archipiélago ha remontado 13 posiciones en los últimos tres años con buenas puntuaciones en salud, infraestructuras, educación básica o preparación tecnológica, pero falla en educación superior

Antoni Riera durante su conferencia a raíz de la actualización del índice de competitividad global, en el Golf Son Muntaner.

Antoni Riera durante su conferencia a raíz de la actualización del índice de competitividad global, en el Golf Son Muntaner. / Impulsa

Myriam B. Moneo

Myriam B. Moneo

Impulsa Balears sitúa a Baleares en la posición 153 del ranking de competitividad global integrado por 234 regiones de la UE-27, según la última actualización del índice de competitividad global, presentado este lunes por su director técnico, Antoni Riera, y que elabora la Unidad de inteligencia económica que confirma que Baleares ha remontado 13 posiciones respecto de la clasificación publicada hace tres años. Sin embargo, urge una mejora de la productividad y en materia de talento un esfuerzo en la educación superior, una debilidad de las islas que lleva a que comunidades como Andalucía, Castilla y León o Aragón adelanten a Baleares.

Esta mejora de posiciones se sustenta en un incremento de la puntuación competitiva de las islas, puesto que el índice, que oscila en una escala de 0 a 100, les otorga 45 puntos (frente a 41,6 puntos, en 2021). Baleares recorta el diferencial negativo respecto de la media –ya que su puntuación equivale ahora al 86,9% de la del conjunto de regiones europeas (versus 81,6% en 2021)– y recorren el 40% del arco de puntuaciones –que se cierra con la región Capital de Dinamarca, que incluye entre otras la ciudad de Copenhague, como la líder.

Cada tres años

El ranking se actualiza cada tres años, ha explicado en rueda de prensa Antoni Riera antes de presentar a empresarios de las islas su informe. El doctor Riera alerta de que el archipiélago no “abandona” la zona de baja competitividad, después de que en la última medición, 2021 la región estaba afectada por la pandemia. La situación actual no es suficiente para alcanzar “el bienestar”.

Llama la atención sobre que Andalucía, Aragón y Castilla y León “han dejado de acompañarnos” por “el esfuerzo” que han hecho por mejorar la educación superior y suben a una competitividad media. Advierte que hay “un problema de inadecuación” por sobre o infraeducación en las islas, cuando “la gran clave” para mejorar la competitividad es el talento. La preparación en tecnología “sirve de poco si luego no hay talento y la mano de obra necesaria". La mejora en la tasa de abandono escolar no es suficiente todavía.

Baleares se sitúa con regiones de Polonia, la República Checa o Lituania, cuando “sobramos en esa zona baja”.

El ranking se articula alrededor de 3 subíndices y 11 pilares sobre competitividad: los requerimientos básicos –instituciones, estabilidad macroeconómica, infraestructuras, salud y educación básica–, los impulsores de la eficiencia –educación superior, eficiencia del mercado de trabajo y medida del mercado– y los impulsores de la innovación –preparación tecnológica, sofisticación empresarial y capacidad innovadora–. Se analizan un total de 72 indicadores parciales diversos, como la calidad gubernamental, la deuda pública, la cobertura 5G, la esperanza de vida, la tasa de paro, la incidencia de enfermedades como el infarto, la población con estudios superiores, la ocupación en servicios avanzados o el gasto en I+D.

Fortalezas

Las principales fortalezas detectadas, que sitúan Balears en un tramo de competitividad ‘alta’ o ‘muy alta’, se encuentran en la salud (posición 8 vs 20, 2021), las infraestructuras (posición 35 vs 34, 2021) y la educación básica (posición 83 vs 134, 2021)– y la preparación tecnológica (posición 46 vs 76, 2021).

Por el contrario, las debilidades se concentran en eficiencia y la innovación, en tramos de competitividad ‘baja’ o ‘muy baja’, como la sofisticación empresarial (posición 151 vs 167, 2021), la eficiencia del mercado de trabajo (posición 185 vs 190, 2021) y la educación superior (posición 194 vs 206, 2021).

Cambio de chip

A pesar de la mejora de la puntuación competitiva, Baleares continúa situada en el tramo de competitividad ‘baja’ del ranking, junto con otras siete comunidades autónomas españolas: Cantabria, Canarias, Murcia, Castilla-La Mancha, Extremadura, Melilla y Ceuta.

Antoni Riera asegura que “para cumplir con las aspiraciones de progreso y bienestar de la sociedad, tenemos que trabajar para conseguir una buena posición en el entorno competitivo. Si una región disfruta de una posición ventajosa en los rankings de competitividad global, quiere decir que tiene la capacidad de ser atractiva en los mercados exteriores y, a la vez, próspera en el interior, porque mejora la calidad de vida de la población local”.

El vicepresidente del Govern balear, Antoni Costa, ha cerrado la jornada destacando la mejora de posiciones en el ranking de competitividad global, “pero no nos podemos quedar aquí, no nos podemos conformar con esto”. La economía de Baleares necesita un nuevo impulso” y corrobora la apuesta por la productividad que plantea el doctor Riera y la competitividad, además de la investigación, la innovación, la transformación digital y la transición energética.

La conferencia de Riera, celebrada en Golf Son Muntaner, ha contado con el apoyo de Trablisa como patrono anfitrión. El director general de la empresa familiar mallorquina, Joaquín García, ha dado la bienvenida al acto .