El Govern prohíbe el uso de los móviles en los colegios e institutos de Baleares

La medida será especialmente restrictiva en Primaria, mientras que en Secundaria se contemplarán algunas excepciones

Se aplicará en todos los centros públicos y concertados de las islas

Los alumnos se muestran satisfechos y creen que era "necesario"

Dos adolescentes consultan su móvil, a la salida de su instituto, en Madrid.

Dos adolescentes consultan su móvil, a la salida de su instituto, en Madrid. / DAVID CASTRO

Irene R. Aguado

Irene R. Aguado

El Govern ha limitado al máximo el uso de los teléfonos móviles en las aulas de los institutos y colegios de Baleares. Solo se podrán utilizar en casos excepcionales, como niños con problemas de salud o actividades concretas en clase que requieran de un dispositivo.

Así lo ha anunciado el conseller de Educación, Antoni Vera, después de la reunión de la Mesa del Alumnado, que se celebra con estudiantes de distintos centros educativos de las islas. La medida será especialmente restrictiva en Primaria, mientras que en Secundaria (ESo y Bachillerato) se contemplan casos puntuales por motivos pedagógicos. "Por ejemplo, si un profesor realiza una actividad en clase y quiere que los alumnos busquen contexto histórico con el móvil", ha explicado Vera.

El conseller ha hablado en todo momento de "limitación", puntualizando que la prohibición no es total porque si un alumno necesita tener móvil, "por ejemplo por cuestiones médicas", podrá hacerlo, pero la instrucción, que se aplicará en todos los centros públicos y concertados, será restringir el uso generalizado de los dispositivos, también en el tiempo de recreo.

De hecho, la gran mayoría de colegios e institutos de Baleares ya contemplan esta medida en sus reglamentos internos. La intención de la Conselleria, ha señalado Vera, es "ponerla en común" en las islas y que todos vayan a la par, "siempre respetando la autonomía de los centros".

Los profesores y maestros, por su parte, sí podrán emplear el móvil, aunque el conseller les ha instado a hacer un uso "adecuado" al contexto y ha pedido que se utilice en casos puntuales y solo si es necesario. En Formación Profesional o enseñanzas de régimen especial, como el Conservatorio, el uso será distinto al ser áreas en las que "hay un mayor número de adultos".

A partir de ahora, la intención del conseller es modificar el borrador con las aportaciones de todos los agentes implicados a medida que vaya presentando la instrucción. Una vez consensuado, la idea es publicarlo en febrero para que entre en vigor este mismo curso escolar.

De hecho, el borrador que ha empezado a presentar la Conselleria ya ha sufrido varios cambios. En principio, la instrucción hace referencia a que los docentes tienen la capacidad de confiscar el móvil como medida correctora, pero este punto se eliminará, aseguran desde Educación. Queda en el aire cómo se formulará finalmente, y si habrá una figura en los centros escolares que tenga poder para requisar un teléfono.

Otro punto que se excluirá del borrador es el que reza que "el centro educativo podrá acceder a los contenidos del teléfono móvil sin el consentimiento de las personas implicadas" en caso de que el colegio lo vea necesario, por ejemplo en situaciones de interés público o que pongan en riesgo la integridad de un alumno. Esta disposición, avisan desde la Conselleria, quedará fuera de la instrucción final porque no se ajusta a la legalidad.

Cabe recordar que Educación no ha estado siempre por la labor de prohibir el móvil en las aulas. Hace tan solo un mes, cuando se puso el debate sobre la mesa, el departamento se decantó por dar "total libertad a los centros" para que regulen el uso de los dispositivos, y prometió elaborar unas instrucciones que en cualquier caso serían opcionales. En tan solo unas semanas, la Conselleria ha cambiado radicalmente de opinión y ha decidido impulsar una limitación generalizada y de obligado cumplimiento, aunque consensuando las condiciones con todos los implicados.

Los estudiantes opinan: lo ven necesario, aunque les preocupa el castigo

Este jueves ha sido el turno de los estudiantes, que se han mostrado satisfechos con la decisión y han considerado que era "necesaria". A la reunión con el conseller han asistido diez jóvenes de todas las islas en representación del alumnado, elegidos por sorteo entre todos los estudiantes que forman parte del Consell Escolar de sus centros.

Uno de ellos era Francesc Bibiloni, del IES Alcúdia: "La prohibición es totalmente correcta. Nos hemos convertido en una sociedad que se comunica más por medios electrónicos, y hay que revertir eso porque al final no es productivo", ha razonado en declaraciones a los medios. Bibiloni ha admitido que en las aulas, especialmente en la ESO, los estudiantes hacen un "uso irregular" de los teléfonos móviles hasta "niveles bastante graves", teniendo en cuenta que esto fomenta el ciberacoso y las malas prácticas con la inteligencia artificial. Con todo, Bibiloni ha trasladado la principal preocupación de los alumnos: los "castigos" que pueda conllevar la medida. "Nos parece correcto que requisen el móvil toda una mañana, pero no varios días, porque nos deja incomunicados por si nos pasa algo", ha argumentado.

Víctor Pons, del IES Biel Martí de Menorca, también ha asistido a la reunión esta mañana y cree que la limitación tendrá un "impacto muy positivo en las clases": "El índice de atención ha disminuido en los últimos años. Esta medida es un paso adelante para mejorar el sistema educativo", ha manifestado. Igualmente, de cara al futuro ha pedido diferenciar entre los "errores", como dejar el teléfono con sonido por descuido, y las "faltas de respeto a la convivencia" entre estudiantes que escogen de forma consciente utilizar el móvil en horas lectivas.