Importantes discrepancias entre los partidos que apoyan al Govern, PSOE, Més y Podemos, está provocando el bloqueo para la sustitución del director de la Oficina Anticorrupción, Jaume Far dimitido el pasado mes de enero. Lo mismo ocurre con el de IB3, Andreu Manresa, que el pasado mes de diciembre concluyó su mandato de cinco años y se le debe renovar o nombrar un sustituto.

El principal problema son los nombres que han aportado los partidos para los dos importantes cargos, ya que los que aportan a unos no terminan de gustar a sus socios. Por ello, la mesa del Parlament ha decidido prorrogar el plazo de elección 15 días más en busca de dos personas de consenso. Tenían hasta día 25 de febrero y se ha alargado hasta mediados de marzo.

En el caso de IB3, el PSOE es partidario de mantener a Andreu Manresa, no obstante desde Més ya anunciaron que quieren un cambio al frente de la televisión pública. En el caso de la Oficina Anticorrupción, tampoco hay demasiado consenso, ya que Més y Podemos temen que los socialistas quieran colocar a alguien de su cuerda.

El portavoz de Podemos, Alejandro López, admitió que esta prórroga de 15 días se debe "a que estamos intentado llegar a un acuerdo para buscar un director de la Oficina Anticorrupción y decidir sobre el de IB3". Pilar Costa (PSOE) restó importancia y se mostró convencida de que al final habrá acuerdo entre los socios. En Més y en Podemos no lo ven tan claro como los socialistas.

Hay que recordar que se necesitan tres quintas partes de la Cámara Autonómica (37 diputados) para designar los dos cargos en primera votación y mayoría absoluta (30 diputados) en segunda. Ahora tienen 15 para llegar a un acuerdo entre los tres partidos y después conseguir el apoyo de alguno de los partidos de la oposición si quieren nombrar al director de Anticorrupción y al de IB3 en una primera votación.