Uno de los mejores planes sin duda para un mallorquín o para alguien que visita Mallorca por primera vez, es perderse por la Serra de Tramuntana que este año cumple 10 años desde su declaración como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Calas, senderos, restaurantes, iglesias, callejones y miradores son algunos de los preciosos lugares que puedes visitar en la sierra.
Estos son 10 de los rincones más mágicos:
Es una cala situada en Escorca y es la desembocadura natural del Torrent de Pareis. Está refugiada entre dos acantilados y divididas por el torrente. Es difícil llegar a la cala pero vale la pena, el paisaje es asombroso y es una de las playas más populares de la isla. Es el destino de la ruta senderista del Torrent de Pareis y además hay una zona con restaurantes e incluso un refugio. Este año se retomó la tradición del concierto coral que se lleva haciendo durante más de 50 años.
Cap de Formentor
Es uno de los imprescindibles de Mallorca, en esta zona podemos encontrar el faro y la playa de Formentor. El faro fue inaugurado en 1863, está a 200 metros de altitud y se convierte en un mirador con vistas espectaculares. La playa tiene aguas cristalinas y está rodeada por un bosque de pinos. Está cerca de uno de los hoteles más famosos de la isla como es el Hotel Formentor.
Deià
Es uno de los rincones mágicos de la isla, un pueblo repleto de arte, música y buen ambiente. Conocido por ser la residencia de diversos artistas como la de Robert Graves a principios del siglo XX. Este pueblo está situado en plena Serra de Tramuntana y es un lugar donde perderse durante horas. Un paseo hasta la iglesia, te llevará a unas vistas espectaculares de los paisajes mallorquines. Otra recomendación es la Cala Deià, una pequeña cala de piedrecitas donde desemboca un torrente y con una peculiar roca en medio del agua.
Fornalutx
Es la combinación perfecta entre paisaje y arquitectura, antiguamente era una alquería árabe. Los sitios más característicos que hay que visitar son el ayuntamiento, la torre de defensa del siglo XVII y ver la parroquia del siglo XII. Este pueblo es el punto de partida para varias excursiones como es Barranc de Biniaraix.
Biniaraix
Es un llogaret situado en el Valle de Sóller, en el corazón de la Serra de Tramuntana. Esta localidad, declarada bien de interés cultural, es una visita obligada de Mallorca sobre todo por el Barranc de Biniaraix a donde se puede hacer rutas de senderismo desde diferentes puntos, es una excursión de dificultad alta pero vale la pena por las vistas.
Cala de Banyalbufar
Es una cala de piedras larga y estrecha con un encanto especial. Para acceder a ella hay que bajar por unas escaleras que conducen a una cascada de agua dulce. Son unas aguas en las que es muy recomendable sacar las gafas de buceo por la cantidad de animales marinos que viven en ellas. El agua es cristalina y tiene unas vistas espectaculares.
Llucalcari
Es un llogaret situado entre Deià y Sóller con tan solo 9 habitantes. En él podemos encontrar alrededor de 15 casas y una pequeña capilla del siglo XVIII. Es Canyaret es el lugar más famoso de Llucalcari, conocido por ser una cala nudista y donde la gente va a ponerse barro por el cuerpo. Es una cala de piedras que tiene una pequeña fuente de agua dulce y con unas muy buenas vistas.
Sa Foradada
Es una de las imágenes más características de la isla y por eso su visita es obligada. Además la excursión que lleva hasta ella es un clásico con un nivel de dificultad bajo. En la zona también está el mirador El Galliner y donde hay también un bar desde donde tienes unas vistas espectaculares.
Caló de s’Estaca
Es una pequeña cala de grava y roca en Valldemossa con aguas cristalinas. En ella se encuentra la finca de s’Estaca que fue propiedad del Archiduque Luís Salvador y que fue adquirida por Michael Douglas.
