Un acuerdo de conformidad evitaría que Rafael Pantoja fuera juzgado el próximo lunes en la Audiencia Provincial de Palma por el crimen machista de Sacramento Roca. El abogado defensor,del procesado, la acusación particular y la fiscalía han ido puliendo los flecos en los últimos días para llegar a un punto de encuentro y evitar la celebración de la vista.

El fiscal pide para Pantoja 27 años de prisión, la pena máxima por este delito. De estos, 25 serían por asesinato con el agravante de parentesco y los otros dos corresponderían a un presunto delito de amenazas.

La celebración de un juicio con jurado en plena pandemia de coronavirus plantea una serie de dificultades casi insalvables para mantener la separación de seguridad debido a la alerta sanitaria por el coronavirus. Este extremo ha hecho que las distintas partes hayan tratado de buscar puntos de encuentro. Hasta el punto de que el próximo lunes se podría alcanzar ya esta conformidad.

De celebrarse la vista oral, el juicio contra Rafael Pantoja por el crimen machista de su expareja Sacramento Roca sería el primer juicio con jurado que se celebra en Balears durante el estado de alarma por la alerta sanitaria del coronavirus. Estas serias dificultades han provocado que las distintas partes se hayan esforzado para acercar su calificación de los hechos y su petición de pena.

El crimen machista de Sacramento Roca ha sido uno de los que más han conmocionado a la sociedad balear por su extrema brutalidad. Los hechos se cometieron la tarde del 16 de noviembre de 2018 en una conocida tienda de muebles situada en la calle Aragón. Sacramento Roca, de 36 años, se encontraba entonces trabajando de cajera.

Pese a que Sacri, como era conocida por sus compañeros de trabajo, había decidido poner fin a la relación, su expareja, el vigilante de seguridad Rafael Pantoja de 45 años, se negaba a aceptar la ruptura y acudía con frecuencia al establecimiento donde la víctima trabajaba y la hostigaba para forzar una supuesta reconciliación.

De acuerdo con el escrito de calificación del fiscal, la tarde del 16 de noviembre de 2018 Rafael Pantoja acudió de nuevo a la tienda de muebles de la calle Aragón donde se encontraba trabajando Sacramento Roca. Sobre las 16.40 horas se dirigió hacia el lugar donde la víctima se encontraba trabajando y le entregó unas fotos.

En vez de abandonar el establecimiento, Rafael Pantoja se dirigió hacia el interior de la tienda de muebles. Al cabo de unos 15 minutos, el acusado regresó a la zona de cajas donde se encontraba trabajando Sacramento Roca. En ese momento, la víctima estaba atendiendo a unos clientes.

Rafael Pantoja intentó iniciar con Sacramento una conversación, pero ella no le pudo prestar atención. Al no lograrlo se colocó sigilosamente a la espalda de la víctima. A continuación la agarró por los hombros mientras tiraba fuertemente del cuello de la mujer para que no se moviera. Acto seguido, con el cuchillo que portaba en una mano le asestó hasta siete puñaladas. Las cuchilladas le causaron la muerte casi en el acto. Sacramento no tuvo la menor oportunidad de defenderse del salvaje ataque de su expareja.

Interceptado por testigos

Tras el crimen machista, Rafael Pantoja emprendió la huida y echó a correr. No obstante, varios testigos, entre los que se encontraba un vigilante de seguridad, fueron tras él y le dieron alcance. Le retuvieron hasta que llegaron agentes de la Policía Nacional y le detuvieron.

De acuerdo con el informe forense, Sacramento Roca recibió puñaladas mortales de necesidad. Así, las cuchilladas le perforaron el pulmón y le afectaron al corazón. El cadáver presentaba hasta siete heridas incisocontusas. El shock hipovolémico que sufrió provocó que la víctima muriera poco después.

Pantoja había hostigado y acosado repetidamente a Sacramento Roca. Cuatro días antes del crimen, la víctima denunció a la Policía Nacional que su expareja le había pinchado las cuatro ruedas del cochele había pinchado las cuatro ruedas del coche. Los agentes que la atendieron no le aplicaron el protocolo de violencia de género. Posteriormente fueron apartados y sancionados.