Las mujeres siguen haciendo historia. Hace un año salieron a la calle en una movilización sin precedentes por la igualdad por las calles de Palma. Ayer lo volvieron a hacer. Volvieron a hacerse oír. Volvieron a salir porque algunas cosas siguen sin cambiar: sigue la brecha salarial, los techos de cristal, el acoso y, lo peor, las siguen matando. Pero este año también tienen más motivos, 1.000 motivos según las convocantes: ahora deben defender que su lucha no es contra los hombres, que lo de pedir igualdad no es cosa de "feminazis", que el dinero que se destina a combatir la lacra de la violencia de género no va a parar a chiringuitos, que no hace falta que a las embarazadas les expliquen qué llevan en su vientre, que cinco hombres penetrando a una mujer mientras la graban con el móvil en un portal es violencia grite o no, o que las puñaladas que recibió Sacri a manos de su expareja, por la espalda y cuando estaba trabajando en su caja de Conforama, no es algo "doméstico". Por todo ello, más de 20.000 personas volvieron a cerrar ayer con una manifestación multitudinaria una nueva jornada de huelga en otro histórico Día Internacional de la Mujer en Balears.

Si alguien pensaba que el feminismo aflojaría, ayer erró. La marcha que salió pasadas las 19.00 horas desde la Plaza de España inundó las Avenidas de Palma en dirección al Paseo Mallorca y hasta Palmasa Feixina, obligando a cortar el tráfico durante cerca de hora y media. Ni organizadores ni asistentes eran capaces de cifrar cuántos eran, pero había algo evidente en lo que todo el mundo coincidía: eran más que el año pasado. Los manifestantes bordeaban ya la Riera cuando algunos todavía estaban saliendo de Plaza España.

La Policía Local volvió a calcular 20.000 personas y la Policía Nacional, que hace un año hablaba de 12.000 participantes, ayer elevó su estimación a más de 15.500.

Gritos contra la Justicia

Si algo caracterizó la marcha es que estuvo protagonizada por gente joven, muy joven, desde la cabecera, con el lema 'Somos la mitad, sin nosotras se para el mundo' del Movimiento Feminista de Mallorca, principal organizador, hasta la cola, que dieron el tono más reivindicativo a la manifestación. Y eso que la manifestación de estudiantes ya había tenido lugar por la mañanala manifestación de estudiantes ya había tenido lugar por la mañana. No obstante, tampoco faltaron mujeres y hombres de todas las edades.

Hubo un especial recuerdo para las mujeres víctimas de la violencia de género. "Somos la voz de las que ya no están" fue uno de los eslóganes más repetido en cánticos y pancartas. "Sola, borracha, quiero volver a casa", fue otra de las proclamas que más pudo oírse en contra del acoso. En la misma línea, carteles de "Mamá, tranquila, hoy no voy sola".

La marcha se detuvo también durante unos minutos delante de los juzgados de Vía Alemanya, donde las manifestantes señalando al edificio lanzaron proclamas de "este juzgado es el patriarcado". La sentencia por el caso de la Manada también se coló con cánticos de "hermana, yo sí te creo" o "hermana, aquí está tu manada".

Sólo faltó el PP

Asistieron numerosas entidades feministas, sindicatos y todos los partidos políticos con representación en Balears, a excepción del PP, que a diferencia del año pasado este año no se ha sumado a la manifestación por no compartir el manifiesto. También asistió la propia presidenta del Govern, Francina Armengol, junto a varios consellers o la delegada del Gobierno, Rosario Sánchez.

En el manifiesto, leído en un abarrotado parque de sa Feixina y redactado por el Movimiento Feminista de Mallorca, se reivindicó "la legalidad total del aborto", una "formación afectivosexual" en las aulas y medidas contra la discriminación, incluidas la brecha salarial.

5.825 víctimas de violencia machista en Balears

Las víctimas de violencia machista aumentaron en Balears un 8,5% en 2018 hasta alcanzar las 5.825, lo que representa una media de 102,7 casos por cada 10.000 mujeres y sitúa las islas como la comunidad con más agredidas, 1 de cada 100.