Los familiares del expresident de Cataluña, Carles Puigdemont, y de los líderes independentistas Jordi Sánchez y Jordi Cuixart, más conocidos como 'los Jordis', en prisión, desbordaron ayer su primer acto de apoyo a los presos por el proceso independentista catalán. 340 personas acudieron al primer Sopar Groc fuera de Cataluña, convirtiéndolo en el segundo acto de este tipo más multitudinario, por encima de las localidades catalanas en las que se ha celebrado, a excepción del que tuvo lugar en Vilafranca del Penedès, que congregó a 500 personas.

El acto, que se quedó sin entradas tuvo lugar ayer en Campanet. La hermana de Carles Puigdemont, Monserrat Puigdemont; el hijo de Jordi Sánchez, Oriol Sánchez; y la hermana y sobrino de Jordi Cuixart, Neus Cuixart y Pol Leiva, fueron los grandes invitados. Durante la cena se proyectó un vídeo del expresidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, hoy en Berlín a la espera de que la justicia alemana se pronuncie sobre su extradición al juez Llarena. En su mensaje, una de las sorpresas del evento, Puigdemont agradeció el éxito del acto en Mallorca y aseguró que seguirá "luchando por la democracia". También se proyectaron vídeos de los exconsellers desplazados a Bruselas, Meritxell Serret y Lluis Puig.

Previamente a la cena que tuvo lugar en Campanet en solidaridad con los presos por el proceso independentista, sus familiares alertaron desde Palma que "esto ya no se trata de independentismo, sino de democracia" y defendieron que "no hay causa" para la prisión preventiva que cumplen algunos de sus familiares o que mantiene a otros fuera de España.

"Tendremos que montar otro"

El acto fue organizado por la Associació Catalana de Drets Civils, que agrupa a las 18 familias de los líderes independentistas encarcelados, junto a la Obra Cultural Balear (OCB) y la Assemblea Sobiranista de Mallorca (ASM), equivalentes en las islas a las catalanas Òmnium Cultural y Assamblea Nacional Catalana (ANC). El líder de la OCB, Josep de Luis, ya informó en la rueda de prensa previa que las previsiones del acto se habían visto desbordadas. "Si fuera ahora duplicaríamos la capacidad. Pido perdón a todos los que se han quedado sin entrada", explicó, para señalar junto a la presidenta de la ASM, Margalida Miquel, que "vista la gran acogida alguna otra cosa tendremos que volver a montar".

Sobre cómo se encuentran sus familiares, el sobrino de Jordi Cuixart, Pol Leiva, explicó que "están bien y siguen fuertes". "Tienen la conciencia tranquila y confían en que cuando esto salga de la justicia española y llegue a la justicia europea las cosas cambiarán e irán a mejor", describió Oriol Sánchez, hijo de Jordi Sánchez, que recordó que su padre lleva ya siete meses en prisión preventiva.

Sobre si les preocupa que el discurso del nuevo candidato a la generalitat Quim Torra pueda perjudicar a sus familiares en prisión, el sobrino de Cuixart manifestó "plena confianza en Quim Torra". "Lo único que no es esperanzador es que pasarán mucho tiempo en prisión", lamentaron las familias.