El juez Castro ha pedido al exconseller de Deportes por Unió Mallorquina (UM) Mateu Cañellas que concrete qué hechos delictivos han podido cometer las tres personas, dos excompañeras de partido y un agente de la Policía Nacional, a las que denunció hace unos días por un supuesto complot para acusarle en falso de corrupción. Castro no investigará el caso hasta que Cañellas no aclare qué delitos atribuye a los denunciados.
Cañellas está imputado en varias causas por presunta corrupción y en una de ellas, una pieza separada del caso Voltor, la fiscalía reclama para él casi 6 años de prisión.
El exdeportista de élite ha denunciado que la exsecretaria general técnica de Miquel Nadal en el Consell de Mallorca, e imputada arrepentida, Eugenia Cañellas acordó con otros exdirigentes de UM, entre ellos Nadal, cargarle a él las culpas de las contrataciones ilegales de enchufados del partido. Eugenia Cañellas habría contado con la complicidad de un agente del grupo de Delitos Económicos de la Policía, la unidad especializada en la lucha contra la corrupción en Balears. Este policía era novio cuando estallaron los casos de corrupción contra UM de la hija de Eugenia Cañellas y habría podido favorecer a su "suegra" en algún atestado. La tercera persona denunciada es Cristina Cerdó, exedil de Cort y muy próxima políticamente a Nadal.
Mateu Cañellas acusa a Cerdó de intentar sobornar con 60.000 euros a una militante de UM en Palma para arruinarle políticamente.
Hechos no investigados
El requerimiento de Castro, al que por reparto recayó el caso, pide al exconseller que no incluya en su ampliación de la denuncia hechos que hayan sido investigados por otros juzgados, ni conjeturas o valoraciones políticas.
La corrupción de UM ha sido perseguida por varios juzgados a través de casos diferentes: Voltor, Maquillaje, Picnic, Son Oms y otros. A su vez estas grandes causas han sido divididas en piezas separadas, muchas de las cuales ya han sido objeto de sentencias firmes.
Una de las principales pruebas que Mateo Cañellas ha aportado del supuesto complot contra él es una grabación de una conversación suya y de Eugenia Cañellas, que tuvo lugar el 19 de marzo del 2010 por la tarde, horas después de que ésta desvelara una trama.
La arrepentida reconoció en esa charla que Miquel Nadal le presionó para que incriminara en falso a Mateu Cañellas.
