El Govern de Jaume Matas acordó, a 48 horas de las elecciones de 2007, dar un contrato de seis millones de euros a las firmas Global PM Consultores y PriceWaterhouseCoopers para supervisar la construcción de Son Espases. La primera consultora -hoy en el punto de mira de la Fiscalía Anticorrupción- había fallado la adjudicación de las obras del hospital público de Son Espases, y anteriormente se encargó de la dirección técnica del metro de Palma; la segunda fichó al propio Matas como asesor en EE UU tras perder el Consolat.
Documentación a la que ha accedido este diario refleja cómo el Ejecutivo del PP no se atrevió a adjudicar definitivamente el contrato millonario. Desistió justo el día antes de que el socialista Francesc Antich tomara posesión como nuevo presidente, tras perder los populares la mayoría absoluta y entrar el Govern en funciones. El detonante fue la denuncia de una tercera licitadora que destapó un supuesto escándalo de espionaje y competencia desleal por parte de las dos ganadoras. "Han obtenido a su favor una propuesta de adjudicación valiéndose de la copia de un proyecto ajeno", acusó a Global PM y PriceWaterhouse esta empresa perdedora. Tras recuperar por segunda vez el gobierno, el Pacto declaró desierto el concurso.
En el caso de corrupción en Son Espases, el fiscal Pedro Horrach investiga el presunto amaño del concurso para que la consultora Global PM eligiera la mejor oferta para el proyecto, de modo que el grupo empresarial encabezado por OHL se hiciera con la construcción del hospital. La manipulación fraudulenta del proceso la ha confesado ante Horrach el ex alto cargo del PP y corrupto 'arrepentido' Javier Rodrigo de Santos.
Como es sabido, la multinacional OHL, cuya cara visible es el exministro Juan Miguel Villar Mir, no llegó a quedarse la obra y en su lugar fue adjudicada a Dragados. Anticorrupción también indaga si el Govern Matas hizo una segunda alteración fraudulenta para beneficiar finalmente al grupo de Florentino Pérez, actual concesionario de Son Espases.
Supervisar la construcción
Ya con las obras del hospital en marcha, en marzo de 2007 el entonces director del IB-Salut del Govern Matas, Sergio Bertrán -persona de confianza del expresidente Matas-, sacó a concurso un contrato para los "servicios de gestión específica del proyecto de construcción y explotación del nuevo hospital universitario".
El importe ascendió a 6.054.273 euros para "planificar, supervisar y controlar el desarrollo del proyecto". Se presentaron cuatro licitadores, si bien uno fue excluido por cuestiones formales.
El viernes 25 de mayo, la mesa de selección acordó "formular la propuesta de adjudicación a favor de la agrupación de licitadores formada por las sociedades Global PM Consultores y PriceWaterHouseCoopers (PWC)-Landwell Abogados y Asesores". Dos días después, el domingo 27, se celebraban las elecciones autonómicas en las que el PP de Matas perdió la mayoría absoluta.
Los miembros de la mesa
En dicha reunión en la que se eligió la mejor oferta participaron, entre otros, el actual director del IB-Salut, Miquel Tomás -que a la sazón ocupaba otro alto cargo en la conselleria de Salud-; el asesor jurídico del departamento, Javier Vázquez; y otros ex altos cargos del Govern popular, como el que luego fue gerente de Son Espases -el ya fallecido Juan Sanz- o el ex director general Josep Corcoll.
A los pocos días de haber fallado a favor de Global PM y PriceWaterhouse, otra sociedad licitadora impugnó el acuerdo. La unión temporal de empresas (UTE) formada por Gerens Management Group, J&A Garrigues S.L. y Globesalud S.A. denunció internamente ante el Govern Matas que las dos ganadoras del concurso le habían plagiado literalmente el "plan de monitorización de las obras" de Son Espases presentado al concurso. Este plan, según la consultora, "es el núcleo sustancial de la oferta contractual", ya que consiste en determinar las responsabilidades de cada agente en relación a las empresas y personas intervinientes en las obras así como el control documental y de los cambios del proyecto. Gerens -especialista en gestión de la construcción y explotación de hospitales públicos- alegó que era "el autor legítimo del documento", que meses antes logró implantar en el hospital público Puerta de Hierro (Majadahonda, Madrid), y acusó a Global PM y PriceWaterhouse de apropiación indebida.
En consecuencia, la firma perdedora del concurso exigió al Ejecutivo de Matas que excluyera "inmediatamente" a las dos adjudicatarias provisionales y suspendiera el procedimiento cautelarmente. Semanas después, Gerens interpuso una demanda ante el juzgado de lo Mercantil de Palma contra Global PM y PriceWaterhouse por "competencia desleal".
Tras examinar la documentación presentada por sus competidoras, Gerens comprobó "con sorpresa e indignación" que el plan de monitorización "era una copia literal" del suyo en el hospital madrileño, adujo en su escrito ante el juez. Sin embargo, el Govern Matas otorgó mayor puntuación a la oferta de sus rivales.
La firma de consultoría tachó en su demanda de muy grave lo sucedido, un "acto desleal de violación de secreto empresarial" de una competidora, puesto que el acceso a este plan era absolutamente "confidencial" y se hizo "sin disponer de autorización".
Desistimiento ante la polémica
Ante la polémica desatada, el 15 de junio de 2007 la mesa de contratación optó por remitir el expediente a un órgano superior. Finalmente, el Govern Matas se vio obligado a paralizar el concurso in extremis. Un escrito oficial del 5 de julio comunica que, "siguiendo las instrucciones de la consellera de Salud" -Aina Castillo (PP)-, "ante el inminente cambio de gobierno y la trascendencia del contrato", se dejaba su futuro en manos del Pacto.
Al día siguiente, 6 de julio, se estrenaba formalmente el nuevo Govern, que abortó el concurso y en su lugar procedió a licitar la supervisión de las obras de Son Espases entre muchas más empresas.
