El borrador que está circulando por universidades y comunidades, y que se concretará en un plazo de dos meses, no sólo habla de penalizar a los malos estudiantes. También habla de incentivar a los estudiantes. Así, por ejemplo, los estudiantes becados que vayan a año por curso y acaben con buena nota podría recibir un plus por ello. Otra medida, que Casas destacó especialmente es la aplicación de becas-salario dirigidas a los alumnos de rentas más bajas.

La rectora cree que el modelo de financiación que recoge el documento ministerial y que se basa en indicadores de calidad (investigación, docencia y transferencia) podría ser beneficioso para la UIB.