De jefe a gefe

Está claro que no soy yo la primera que hablo de gefes con g, pero cuando empecé a escuchar este término me encantó, gestores de felicidad, debería ponerse mucho más de moda. La felicidad en el trabajo es un tema que ha cobrado, y que actualmente cobra cada vez más importancia. A medida que las empresas y las organizaciones nos damos cuenta de que un ambiente laboral positivo y saludable puede tener un impacto significativo en la productividad y bienestar de los empleados, se han tomado, y se siguen tomando cada vez más medidas para fomentar la felicidad en el trabajo.

Pero ¿qué es la felicidad en el trabajo?, ¿es posible ser feliz trabajando? ¿De qué depende mi felicidad en el puesto de trabajo?... en términos simples, se trata de sentirse satisfecho y contento con lo que se hace, un equilibrio entre lo que uno aspira y lo que uno tiene. Un ambiente en el que no solo se trabajen relaciones productivas, sino que también podamos trabajar relaciones positivas tanto con los compañeros como con los superiores. Pero no idealicemos la felicidad en el trabajo con ejercer nuestras funciones de forma perfecta, sin desafíos ni dificultades, sin estrés ni tensiones, sin prisas, sin la presión de cumplir los objetivos, encontrar la felicidad en el trabajo significa encontrar un equilibrio general en la vida laboral.

En este punto cobra un gran peso la función de los responsables con los equipos, y es que una de las patas más importantes de este equilibrio significa pasar de ser jefe, con lo que conlleva tradicionalmente ser jefe, supervisar, dirigir, ordenar, coordinar a convertirnos en líderes afectivos o Gestores de Felicidad.. gefes, se trata de poder dirigir, supervisar, coordinar y ordenar desde una posición empática con nuestros equipos, tener un alto conocimiento del mismo y de sus miembros, capaz de convertir los beneficios de la empresa en constantes y sostenidos y donde todos forman parte.

Si te has planteado pasar de jefe a gefe quizás sea interesante que:

  • Incorpores de forma habitual el reconocimiento a los miembros de tu equipo por los logros obtenidos o su contribución a los mismos. No solo incrementa la confianza en el equipo, sino que promueve alcanzar metas más ambiciosas.
  • Potencies una comunicación fluida y honesta, convertir la comunicación en directa y asertiva pero en respetuosa.
  • Contagies pasión por el buen hacer, y disfrutando de los que se hace.
  • Interactúes con todos los miembros del equipo para incrementar el conocimiento de estos. Conocer sus inquietudes, sus aficiones, sus situaciones personales, sus ambiciones profesionales.
  • Busques soluciones a los conflictos a través de un trato cercano y colaborativo, convertirse en una persona resolutiva capaz de convertir los problemas en retos y las quejas en oportunidades.
  • Cambies la rigidez por la flexibilidad, cambiar las reglas fijas y tradicionales, por implementar procesos que den autonomía, y que respeten la forma de trabajar, quedando abiertos a ideas nuevas.

Ojo, que convertirse en gefe en ningún caso es convertirse en colega o amigo, evitar que se extralimiten las relaciones, sin sobrepasar la delgada línea entre lo que se debe hacer y lo que no.