Ciclismo

El artanenc Enric Mas liderará un año más al Movistar Team en el Tour de Francia

El ciclista de Ses Salines Lluís Mas, que finalizó tercero este pasado viernes en el Nacional de contrarreloj, se queda fuera de la lista

Jaume A.

Estrenando equipación –la colección ‘Iceberg’ de Gobik-, saliendo desde casa y con un recorrido tan emblemático con exigente, Movistar Team afronta en este 2023 nada menos que su cuadragésimo primera participación consecutiva en el Tour de Francia. Con el artanenc Enric Mas como faro de cara a la general, a la vez que con un ojo en la lucha de cada día en la carrera más mediática del calendario, los azules -transformados en blancos por tres semanas- intentarán volver a dar gloria a la gran ‘M’ en su decimotercer año de patrocinio. El ciclista de Ses Salines Lluís Mas, que formó parte del equipo en el último Tour, finalmente se queda fuera para la edición de este año.

En lo que resulta casi una imitación de La Vuelta, el recorrido de la ‘Grande Boucle’ de este año obligará a pelear casi desde salida. Las dos jornadas íntegras por Euskadi son duras: Vivero (2ª) y Pike Bidea (3ª) en Bilbao, el sábado 1; y Jaizkibel (2ª) a 16 km de San Sebastián, el domingo 2. Tras dos opciones más claras para los sprinters en Bayona (lunes 3) y el circuito de Nogaro (martes 4), entrarán en unos tempraneros Pirineos: Soudet (HC) y Marie Blanque (1ª) el miércoles 5 y una señora sexta etapa (jueves 6), con Aspin (1ª), Tourmalet (HC) y final en Cauterets (1ª).

Atravesando las llanuras de Aquitania por Burdeos (viernes 7) y Limoges (sábado 8), llegarán a la recuperación de una leyenda: el Puy de Dôme (HC), final en alto previo al primer descanso (domingo 9) con unas rampas brutales en su segunda mitad. Con dos sprints tras ese ‘repos’ inicial, las fugas vencedoras -tan características del Tour- deberían hacer acto de presencia a partir del jueves 13, en un ‘serrucho’ final hacia Belleville.

La montaña volverá el 14 de julio, en tierras del Ain, con la subida al Grand Colombier (HC). Será el anticipo de los Alpes, divididos en dos, con el tercer fin de semana compuesto por Cou (1ª), Feu (1ª), Ramaz (1ª) y Joux Plane (HC), el sábado 15; y Forclaz de Montmin (1ª), Croix-Fry (1ª), Amerands (2ª) y Saint-Gervais (1ª), el domingo 16.

Para el martes 18 de julio, nada menos que en la decimosexta fracción, queda la única contrarreloj individual, en absoluto llana, con el ascenso a Domancy (2ª) antes de la meta en Combloux (22,4 km). Los Alpes se cerrarán con, posiblemente, la etapa reina de este Tour (miércoles 19): aunque con solo 165 km, se pasan Saisies (1ª), Cormet de Roselend (1ª), Longefoy (2ª) y el larguísimo Col de la Loze (HC; casi 30 km desde pie de puerto) camino del Altipuerto de Courchevel.

Aquí no se acaba la montaña: este año, tras dos jornadas llanas camino de los Vosgos, la carrera se decidirá el sábado 22 con un último raid de ascensiones que recordará la etapa donde Annemiek van Vleuten sentenció el Tour 2022. Solo 133 km, pero con Ballon d’Alsace (2ª), Petit Ballon (1ª), Platzerwasel (1ª) y otras tres cotas puntuables camino de Le Markstein.