DANZA CRÍTICA

IN-GRAVITY

Humans 2.0, un espectáculo entre la danza contemporáneas.

Humans 2.0, un espectáculo entre la danza contemporáneas. / David Kelly

Pere Estelrich i Massutí

Pere Estelrich i Massutí

[object Object]
  • Auditòrium de Palma
  • Cicle de dansa (12-01-24)

El ciclo de danza que programa el Auditorium de Palma merece una atención especial, ya que es una propuesta de gran nivel que permite contemplar, en Mallorca, proyectos que dan la vuelta al mundo, actuando en los mejores escenarios.

Por otra parte, ese festival de baila tiene un valor añadido: el del riesgo. Sí, los organizadores arriesgan con algunas de las sesiones, ya que no solo de tutús y pas a deux vive el aficionado.

Pues bien, en dos sesiones a media platea (una auténtica lástima), la Sala Magna fue el escenario en el que pudimos contemplar una maravilla: el grupo Circa y su espectáculo Humans 2.0, un atrevimiento a medio camino entre la danza contemporánea y la acrobacia.

Circa es un grupo de vanguardia, sin duda, sus coreografías son pioneras en la experimentación del espacio escénico vacío, sin elementos, pero también lo es en la manera de transformar el cuerpo humano en belleza dinámica.

En ese espectáculo, Humans 2.0, parece como si algunas teorías físicas, como la de la gravitación, pudieran controlarse. Los cuerpos de los bailarines/acróbatas, caen a cámara lenta, se deslizan, como si no tuvieran peso, por cuerdas suspendidas, incluso parecen volar por el escenario. Y todo con el arte, con la estética como primicia. Para los cuerpos jóvenes de Circa, parecen no existir fronteras ni límites al movimiento.

Y todo, con el fondo musical, rítmico, agresivo a veces, minimalista siempre, del compositor Ori Lichtik.

Humans 2.0 busca el reto, persigue llevar al límite las posibilidades del cuerpo humano, pero siempre con la belleza como objetivo. Y lo consigue, vaya si lo consigue. No por casualidad, ese espectáculo, venido de Australia, está dando la vuelta al mundo. De hecho, de Madrid ha parado en Palma y se instalará en Barcelona, para luego seguir su camino hacia otras capitales.

Sin duda esa propuesta merecía más atención por parte del público mallorquín.

Suscríbete para seguir leyendo