Lo que debía ser una apacible travesía por las costas sicilianas acabó ayer en la peor experiencia náutica de Nicolás Ramis, un joven mallorquín de 23 años que participaba en una regata en Malta. Un enorme petrolero arrolló de madrugada al velero en el que navegaba junto a otras diez personas tras abandonar la competición por una avería. "Al ver que el buque iba a embestirlos, se lanzó al agua", explicaba ayer el hermano del náufrago. "Pasó mucho miedo porque creía que los motores del buque iban a succionarlo. El velero quedó dañado y a la deriva y sus compañeros no podían rescatarlo. Estuvo tres cuartos de hora en el agua, hasta que un equipo de Salvamento Marítimo llegó allí y lo sacó. Está bien, pero todavía nervioso por la experiencia vivida y con ganas de volver a Mallorca cuanto antes", relataba su familia.

Ramis viajó la semana pasada a Malta para competir en la Rolex Middle Sea Race, una regata en la que los participantes recorren durante varios día más de 600 millas bordeando Sicilia y las islas Pantelaria y Lampedusa. El navegante mallorquín, con otras diez personas, iba a bordo del Buccaneer, un velero de bandera belga y con base en Valencia en el que se ofertan plazas para participar en este tipo de regatas.

El barco zarpó el pasado sábado por la mañana del puerto de La Valeta. Justo dos días después, superado el Estrecho de Mesina, una avería le obligó a dar media vuelta y regresar a Malta, donde tenía previsto atracar anteanoche.

Poco antes de la medianoche del martes, cuando el Buccaneer se encontraba a unas 15 millas de La Valeta un petrolero se cruzó en su camino. El tripulante mallorquín descubrió que el velero iba a ser arrollado y saltó al mar. El choque provocó importantes daños en la popa del Buccaneer, que quedó a la deriva y sin gobierno.

"Creía que los motores del petrolero iban a succionarlo. Nos ha dicho que pasó mucho miedo y que temió por su vida", explicaba ayer un hermano de Nicolás Ramis. "El resto de tripulantes no podían dominar el velero, por que les fue imposible rescatarlo. Tuvo que mantenerse a flote durante tres cuartos de hora hasta que un equipo de salvamento lo sacó del agua", contaba este familiar, que aseguraba que "el petrolero no se detuvo, probablemente porque ni se dio cuenta del choque".

Entrada ya la madrugada, efectivos del Search and Rescue de Malta, dependiente de las Fuerzas Armadas de aquel país y encargado de los rescates marítimos, trasladaron al joven mallorquín y a sus compañeros hasta La Valeta, mientras el velero era remolcado a puerto. "No le ha pasado nada y está bien, aunque sigue angustiado y nervioso por lo que ha vivido", aseguraba un allegado al joven mallorquín, que pudo contactar ayer por la mañana con su familia. "En cuanto pueda, coge un avión para volver a Mallorca. No quiere estar allí más de lo necesario".