Como en todos los ayuntamientos de Mallorca, en el de Búger se ha llevado a cabo el recuento de facturas que se deben a los proveedores. Bartomeu Alemany, alcalde, se ha llevado un buen susto al ver el resultado. Tal es el abultado volumen de deudas que lo no quiso hacerlo público hasta no tener detallado qué corresponde a esta legislatura, "qué a la anterior y qué a la reanterior", textualmente. El hombre quiere curarse en salud y está pensando organizar un acto público para explicarlo convenientemente. "Yo he hecho las cosas bien y no quiero ahora dar una cifra y que todos piensen que esto es culpa mía", decía. Vamos que en Búger cada palo va a tener que aguantar su vela... o es llum d´oli.
Y hablando de sustos
Andreu Isern, que ayer cortó la cinta inaugural de las nuevas y flamantes calles peatonales de Consell, puede poner sus barbas a remojar. Ayer esperaba a representantes del Govern a la inauguración y nadie acudió. Alguien dijo si era un mal augurio; sobre todo, teniendo en cuenta que las obras han costado 230.000 euros, que se deben a la empresa, y que el Govern debe aportar el 90%. ¿Sería por eso que se hizo el sueco?
El patio de Ponent
Las ´eternas´ obras de ampliación del patio del colegio Ponent de Inca están casi acabadas. Se dice que se inaugurarán dentro de una semana. Menos mal, Això haurà estat més llarg que les obres de la Seu.
