Educación estudia crear un complemento retributivo para solucionar el tema del pago del verano a los interinos que hayan trabajado más de 165 días.

Esta medida estaba incluida en el Acuerdo Marco firmado por el conseller March con STEI-i, CCOO y ANPE. Este año entraba en vigor, pero en los presupuestos ha quedado reflejado con un matiz que según los sindicatos reduce considerablemente el número de profesores que podrían cobrarlo: además de atesorar 165 días de trabajo durante el curso, los interinos deben estar trabajando el 1 de junio (así, si el titular de la plaza se reincorpora antes de ese día, el interino ya no podrá cobrarlo).

"Dos personas no pueden cobrar por la misma plaza", argumenta la directora general de Personal Docente, Rafi Sánchez, quien recuerda que los presupuestos reservan cinco millones para esta cuestión (lo que supone abonar el verano a algo más de un centenar de docentes). Sánchez subraya que los interinos que cubren vacantes de todo el año cobran el verano desde 2015 y que los que hacen sustituciones largas perciben en su indemnización la parte proporcional del verano que les corresponde.

Ahora, para abonar el verano a todos los que hayan trabajado 165 días, la directora general estudia cómo crear un nuevo complemento retributivo que comenzaría a abonarse este año.