Los jóvenes españoles empiezan a consumir bebidas alcohólicas entre los 13 y los 14 años y más de la mitad de los adolescentes de entre 14 y 18 años (el 58%) asegura haber tomado alcohol en el último mes, según revela el estudio ´Jóvenes y alcohol 2010´, elaborado por Petra María Pérez, investigadora del Instituto de Creatividad e Innovación Educativa de la Universitat de València.

A pesar de este dato, el estudio también revela que el 30% de los jóvenes de entre 15 y 30 años consume alcohol en la calle. El perfil del joven que practica el botellón es el de un estudiante de clase media que vive en el domicilio familiar.

En cuanto diferencias entre comunidades autónomas, la investigación destaca que en Balears es donde menos está arraigada la práctica el botellón. Sólo el 9% de los jóvenes isleños dice haber participado en alguno. En el lado contrario, Castilla La Mancha es la comunidad en la que esta práctica es más común. El 43% de sus jóvenes dice practicarlo habitualmente.

Los datos recabados por Petra María Pérez también revelan que el consumo de alcohol en la calle ha disminuido cinco puntos con respecto a los datos del año 2006 y el consumo general de bebidas alcoholicas entre menores de 18 años se ha reducido un 18 por ciento desde ese año.

Para la investigadora, la práctica del botellón forma parte de la cultura juvenil de nuestra sociedad y constituye una conducta de riesgo que los adultos suelen considerar un problema social.

En sus conclusiones, Petra María Pérez afirma que la mayoría de la población, el 97%, considera que las medidas educativas son las más eficaces para evitar el abuso de alcohol, mientras que el 87 por ciento cree que las medidas prohibitivas pueden generar el efecto contrario y fomentar el consumo.