Crítica directa del Gobierno al juez Manuel García Castellón. La vicepresidenta tercera, Teresa Ribera, cuestiona al magistrado por sus causas contra Carles Puigdemont y Marta Rovira, en momentos políticos sensibles. Un reproche que ha levantado la indignación del Partido Popular, que acusa al Gobierno de asumir el discurso independentista de que la Justicia no es imparcial. Piden que el presidente desautorice a Ribera. Lo que ha hecho Moncloa es emitir un comunicado para dejar clara su posición. La misma, en boca de la ministra Margarita Robles. El revuelo ha provocado también las reacciones de los independentistas. Pere Aragonès acusa al juez de obsesión por incriminar al independentismo.