Cuando nos compramos ropa, zapatos o complementos en una tienda, normalmente salimos de allí casi convencidos de que nos queda divinamente.

Hoy en día, con el auge de las compras online, que cuentan con más comodidad e incluso precios más bajos, son muchos los que hace meses que no se pasan por un centro comercial. Hacer compras por internet tiene sus ventajas y sus inconvenientes, uno de ellos es que la ropa no te quede bien.

En muchos casos, la ropa que hemos adquirido a través de páginas web, no nos queda del todo bien. La solución está en arreglarla o devolverla.

Con los zapatos ocurre lo mismo, pero si te vienen bien de talla, pero algo estrechos, hay algunos remedios caseros con los que puedes solucionar este problema.

Cuándo no debes usar el secador de pelo o el congelador

Uno de los remedios más tradicionales para aflojar los zapatos y que funciona es el de aplicar calor con un secador de pelo. Este truco suele ser efectivo solo en zapatos de cuero o de gamuza.

Con el congelador ocurre lo mismo, la idea es llenar una bolsa con agua, meterla en el zapato y colocar ambas en el congelador durante unas horas. Al convertirse en hielo, se hincha y estira el calzado. Suele funcionar con zapatillas deportivas o de lona, pero para tejidos más delicados, corremos el riesgo de arruinarlos irremediablemente.

El secreto: una patata

Aunque parezca mentira, el truco de la patata es efectivo. Coge una de tamaño grande, quítale la piel, sécala bien y ponla dentro del zapato. Déjalo reposar durante unas 12 horas y retíralo. El zapato debe tomar la talla deseada. Si sigue apretado, repite el proceso.

Devolver el blanco a las zapatillas

Para poder deshacerte de las manchas de las zapatillas blancas y devolverlas a su color original, tus mejores amigos serán el bicarbonato y el vinagre blanco. Además, su uso es antibacteriano y elimina el mal olor que se queda en los playeros por el uso continuado.