El herido en la explosión de Andratx admitió a un sanitario que dejó el gas abierto en un intento de suicidio

Los investigadores de la Guardia Civil todavía no han podido entrar en el inmueble por el riesgo de derrumbe

Estado en el que quedó la casa de Andratx tras la explosión.

Estado en el que quedó la casa de Andratx tras la explosión. / DM

Xavier Peris

Xavier Peris

El hombre que en la noche del pasado lunes sufrió gravísimas heridas en la explosión de gas butano en su domicilio de Andratx comentó esa noche a uno de los sanitarios que había dejado el gas abierto en un intento de suicidio, según las declaraciones recogidas por la Guardia Civil. En cualquier la investigación sigue abierta y los técnicos del Equipo de Criminalística no han podido acceder al interior de la vivienda siniestrada para realizar una inspección por el grave peligro de derrumbe.

La Guardia Civil está tratando de determinar las circunstancias en las que se produjo la explosión de la vivienda de la calle Nord de Andratx, que el lunes por la noche voló por los aires, causando gravísimas quemaduras a uno de los residentes, un hombre de 53 años. El otro inquilino, que vivía en la planta baja, salió milagrosamente ileso después de que la casa prácticamente se derrumbara encima suyo.

Inmediatamente después de la explosión, la víctima fue rescatada por varios vecinos y una patrulla de la Guardia Civil que estaba en las proximidades, y trasladado por una ambulancia del 061 a Son Espases. Desde allí fue evacuado esa misma madrugada al hospital de la Vall d'Hebron de Barcelona, donde permanece en la UCI, en estado crítico.

Los especialistas del Equipo de Criminalística de la Guardia Civil acudieron el martes por la mañana al domicilio siniestrado, si bien no pudieron entrar a realizar una inspección ocular porque la estructura que quedaba en pie estaba en una situación muy precaria, y podría venirse abajo en cualquier momento. Al origen de la explosión por una acumulación de gas butano se llegó desde un primer momento por eliminación. La casa no tenía suministro de gas y era la única explicación posible.

La Guardia Civil ha proseguido con la investigación y ha tomado declaración a diversos testigos para tratar de determinar cómo se produjo la explosión. Entre ellos están los sanitarios que atendieron a la víctima en un primer momento, que han manifestado que el hombre les dijo que había sido él quien había dejado la espita de gas abierta, al parecer en un intento de suicidio. La investigación oficial sigue abierta y las conclusiones no serán definitivas hasta que se lleven a cabo otras diligencias, como la inspección ocular en el lugar, que sigue pendiente.