La muerte por suicidio del hermano menor del alcalde de Lloseta, de 37 años, ha sobresaltado la mañana de este miércoles a los residentes en el pueblo. Nadie había advertido nada en él que hiciera presagiar sus intenciones suicidas.

"Hace dos días le vi aquí y estaba la mar de tranquilo", han apuntado en la cafetería que frecuentada . Esta se encuentra situada a escasos metros de la estación del tren de la localidad. A primera hora de la mañana de este miércoles, un kilómetro más arriba, el fallecido había decidido acabar con su vida.

"Se le veía tranquilo, normal. Casi a diario se paseaba por el pueblo. Nadie nos esperábamos que hiciera esto", han apuntado. El fallecido se dedicaba por completo a las tareas del campo, aunque solía darse una vuelta por los bares y comercios del pueblo.

La víctima hacía dos años había sido detenida por una presunta agresión sexual a una joven del pueblo. Pero el caso quedó archivado por falta de pruebas. "No tenía cuentas pendientes con la justicia y, la denuncia por la que fue arrestado, no se llegó a demostrar. Él tampoco quiso ir más allá", han resaltado.

El Teléfono de la Esperanza de Baleares atendió en 2021 un total de 239 llamadas de temática suicida. Un incremento de 164 personas respecto a 2020 y de 199 frente a 2019. El número del Teléfono de la Esperanza es el 971461112. El Ministerio de Sanida ha puesto en marcha en mayo el 024 para la ayuda al suicida.