Describen su estilo como indie/rock americano de los 90, aunque en su último trabajo también hay lugar para temas más garageros, emotivos y hasta alguno que otro bailable -siempre acompañado de sus características guitarras punzantes-. Javi Adrover -cantante-, Dani Rosa -batería-, Pedro Martínez -bajo- y Manu Rec -guitarra- forman los Black Islands; una de las destacadas bandas emergentes del momento, cuyo nombre guarda estrecho vínculo con la isla mallorquina.

El grupo, que se autodefine como "difícilmente etiquetable", confiesa no tener pretensiones. Su música surgió como excusa para reunirse los viernes por la noche y festejar un poco. Sin embargo, el ruido desacompasado que retumbaba en aquel garaje convertido en local de ensayo, resultó adictivo.

Con el paso de los meses, la idea fue creciendo y solidificándose, hasta que dos de sus componentes decidieron aprender a tocar nuevos instrumentos. "Precisamente la inexperiencia de éstos y lo que parecía ser una limitación acabó convirtiéndose en su marca a la hora de tocar: una inocencia casi infantil", cuenta Adrover.

La aceptación por parte de los amigos y conocidos de la banda resultó ser tan buena como la de los desconocidos que se topaban con sus melodías. El grupo, que nunca esperó tener tan buena acogida, confiesa que al principio le costó dar el paso por miedo a no estar a la altura: "Pero al ver que la gente nos animaba, acabamos despegando". El comienzo de la banda, como muchos otros que acabaron convirtiéndose en grandes estrellas, se debió a la más pura casualidad. Una de sus maquetas llegó a manos del organizador del Surface Festival de Barcelona -dirigido a bandas emergentes-, Pablo Molinero, quien les propuso formar parte de la edición 2012.

"Este concurso consta de diversas fases que deben superarse durante todo el año. Nosotros quedamos primeros entre las bandas nacionales y pudimos viajar a Londres para la final -explica, orgulloso, el vocalista-. Un certamen que, a pesar de no ganarlo, les ha dado tablas y experiencia.

Pero diferente es el trabajo dentro de un estudio de grabación; algo que ellos mismos comprobaron poco después, al recibir una oferta para publicar su primer EP; una oportunidad que dicen valorar mucho: "Tuvimos mucha suerte y trabajamos con grandes profesionales, pero en el fondo sentimos que el sonido no quedó como queríamos. Esperábamos otro estilo€", por lo que argumentan que, en estos momentos, su fuerte son las actuaciones en vivo.

No obstante, este equipo presume de disfrutar cada momento sin prisas. Cuentan que durante sus actuaciones hicieron amistad con otras bandas con las que luego han podido colaborar organizando sus propios conciertos. Además, el cuarto miembro se unió al grupo tras quedarse prendado durante una de sus actuaciones. "Lo que está claro es que nadie te regala nada; debes aprovechar cada situación y tener iniciativa", señala Adrover.

Estos músicos son conscientes de la dura situación que se vive actualmente en el mundo discográfico, pero aseguran no tener metas más allá de interpretar sus canciones y sacar un disco cuando se pueda. "Para nosotros, el éxito no es fama o vender miles de discos, sino más bien como que la gente salga contenta con las actuaciones", agrega.

Prueba de ello es el entusiasmo que muestran al hablar de su actuación en la Sala Apolo para el Showcase Xtrarradio Musicfest, todo un reto para este cuarteto que, durante años, había asistido a incontables fiestas en la misma sala.

Hace poco más de dos años desde la creación de este grupo que, a pesar de su juventud musical, asegura sentirse más cómodo sobre el escenario: "Antes era terrorífico, pero ahora tenemos una actitud mucho más natural y nos vamos soltado". Tanto es así que en sus últimas actuaciones en Mallorca -tierra de varios de los componentes- salieron al escenario en pantalón corto y chanclas.

Este mes de octubre el grupo vuelve a sumergirse en los estudios para preparar el que será su primer LP.