Esta es la historia de Vilafranca contada en un vuelo

La autora Maria Estelrich presenta ‘Ales, ales, ales. Una volada per damunt Vilafranca’ esta tarde a las 19 horas en el Teatre

Rosa Ferriol

Rosa Ferriol

Para Maria Estelrich escribir es una «manera de ser». La autora, que siempre piensa de manera didáctica, lleva las gafas puestas para ver la vida de manera entusiasta. Así, esta tarde a las 19 horas presenta en el Teatre Municipal su historia Ales, ales, ales. Una volada per damunt Vilafranca, un relato en forma de cuento que con las inéditas ilustraciones de Pere Pascual realiza un paseo por el municipio recordando los topónimos, las fiestas, la cultura y la gastronomía que conforman la personalidad de Vilafranca. El libro, que ofrece a los lectores un sinfín de conocimientos a través de una historia de amistad, también es una invitación a conocer este municipio del Pla.

Los protagonistas de la historia son en Ventijol y na Brisa, «dos vientos que nacen en Vilafranca», que junto a la Rupit y el Passerell sobrevuelan el municipio para que a través de su historia quede reflejado cómo es el pueblo. Así, el relato se convierte en una herramienta didáctica que también divulga las diferentes aves que se pueden observar en las tierras del Pla de Mallorca. De hecho, el libro incorpora un código QR con la propuesta didáctica diseñada para la ocasión tras la lectura del relato.

Esta es la historia de Vilafranca contada desde el aire

Esta es la historia de Vilafranca contada desde el aire / R.F.

El cuento, enfocado tanto al alumnado de Primaria como de Secundaria y a los propios adultos, presenta a través de sus protagonistas los conflictos, las emociones, los pensamientos y las decisiones que implica el hecho de vivir. Así lo cuenta la autora, «como si fueran humanos, la Rupit y el Passerell tienen que afrontar muchas vicisitudes propias de las personas. En la narración conocemos cómo viven, se alimentan, se desplazan, se relacionan, interactúan, sienten, piensan y aman. Se comprueba que con la ayuda de los amigos muchas veces se pueden superar las dificultades». Además, a través de estas dos aves tan diferentes se exponen los valores básicos de los humanos y los mecanismos de defensa que uno tiene para superar los obstáculos que la vida te pone delante.

Además esta radiografía desde el aire plasmada en el papel busca retratar las fiestas y costumbres que «nos identifican como vilafranquers». «Es un placer darlas a conocer a los más jóvenes y a todos aquellas personas que han elegido La Vila para vivir para que las puedan disfrutar plenamente». 

Con este cuento, Maria Estelrich pretende «trabajar de forma lúdica unos conocimientos que son significativos para todos nosotros y hacer de estos conceptos, una herramienta de conocimiento, valoración y transmisión para niños, jóvenes y adultos sean nacidos en Vilafranca o procedentes de tierras lejanas». «Somos tierra de acogida, por ello, les tenemos que saber explicar nuestros valores y costumbres. «Cambian los paisajes rurales, los paisajes urbanos y los paisajes humanos. Todo cambia y nos debemos adaptar. Pero también creo que para que los recién llegados puedan apreciar nuestras tradiciones, hace falta respetarlas y para respetarlas las deben conocer».

"Somos tierra de acogida, por ello, les tenemos que saber explicar nuestros valores y costumbres"

«Si queremos que sean de La Vila es imprescindible que conozcan nuestros valores», defiende. Es lo que ocurre en el cuento. Ventijol es aventurero y deja la isla para descubrir nuevos sitios, nuevas tradiciones y nuevas lenguas, por ello, viaja hasta Polonia, donde conoce a Rupit y su grupo que decide volar hasta Mallorca. Será aquí donde Passerell y Brisa les guían y les dan a conocer su pueblo. Es una historia de amistad e integración en la que, sin embargo, Rupit constantemente se pregunta si un rupit puede ser amiga de un passerell cuando son tan diferentes. Tras terminar el libro, el lector tiene su respuesta.

El libro está estructurado por las estaciones del año. «Era la manera más sencilla de presentar las fiestas y también las aves migratorias que visitan la isla», confiesa. Además este cuento atesora palabras propias de nuestra lengua «en peligro de extinción». Para que la lectura sea más comprensiva, se adjunta un glosario con palabras y expresiones propias de antaño.

Un libro divulgativo

El objetivo, resume, es que sea «un libro divulgativo porque explica las tradiciones, las costumbres o los topónimos que conforman la historia de Vilafranca». Es un libro que, además, hace un estudio de las personas y de la cultura del pueblo. El relato concluye con el Romanç de la Rupit i el Passerell que ha musicado Pere Víctor.

Maria Estelrich hace un agradecimiento público al «gran equipo que ha hecho posible este libro», que también ha contado con gente procedente de otros países que se ha quedado en Mallorca. «Es un libro colectivo», insiste la autora, que confiesa que «escribir me llena de felicidad, me da mucha alegría y unas relaciones fabulosas con gente que me aporta mucho». Asimismo, la autora cita a Natalie Goldberg que en el libro El gozo de escribir deja claro que «escribir no es una manera de hacer, es una manera de ser».