Sant Jordi 2024: ¿Cuáles son los libros más queridos de la presidenta Prohens o de Abdón Prats?

Personalidades de diferentes ámbitos explican cuál es esa lectura que significa algo especial en su vida

Se acerca Sant Jordi 2024.

Se acerca Sant Jordi 2024. / Ingimage

Montse Terrasa

Montse Terrasa

Hay libros que tienen un valor especial, que significan mucho en la vida de quien los ha leído, quizás no solo por su calidad literaria, sino por el momento en que fueron descubiertos, o por la persona que lo regaló... Son esos libros queridos que siempre formarán parte de la biblioteca personal. Personas conocidas en distintos ámbitos explican cuál es ese ejemplar que destaca sobre otros y el motivo.

Fue en un Sant Jordi cuando un joven Carles Recasens, actual presidente del Col·legi de Metges de les Illes Balears, recibió de su por entonces novia Los renglones torcidos de Dios, de Torcuato Luca de Tena. «Es el primer libro que me regaló mi mujer, en ese momento, yo tenía 20 o 21 años. Por aquellos entonces, yo no sabía que quería ser psiquiatra ni que lo iba a ser, con lo cual es un libro al que tengo un especial cariño». Ahora, comenta, prefiere la novela histórica y de entre los autores, Ken Follet.

A la presidenta de Balears, Marga Prohens, le marcó de muy joven una obra de una autora mallorquina. «El libro más especial es Dins el darrer blau, de Carme Riera, porque lo cogí de la estantería de mi madre, es el primero que leía de Carme Riera y, además –ahora se está planteando llevarlo a la ópera–, es el libro que me hizo descubrir a una autora de la que después me lo he leído absolutamente todo». «Es un libro que leía hace muchísimos años, diría que más de 20 años, y creo que forma parte de la historia de Mallorca, de Palma, del barrio judío... Y, después, cuando viví ahí, y aún ahora, cuando paseo por el barrio judío, me vienen pasajes concretos del libro».

Yourcenar, García Márquez y más

Margalida Ramis, presidenta del grupo ecologista GOB, tiene muy clara su respuesta: Memorias de Adriano, de Marguerite Yourcenar. «Lo leí en castellano y la traducción de Julio Cortázar es una joya. El libro lo es, por la densidad del relato y la belleza del lenguaje y de los gestos humanos que se explican en él. Una auténtica maravilla. No he encontrado nunca un libro que se le parezca. Desde entonces, mi fascinación se volcó en Marguerite Yourcenar y he leído todo lo que encontrado de ella y sobre ella».

El libro lo conserva, en una edición nada especial. «Me consta que hay otras muy bonitas. Siempre lo busco por librerías de segunda mano por si encuentro una edición mejor».

El decano del Colegio de Arquitectos de Balears, Bernat Nadal, podría mencionar más de uno de esos libros queridos. «Hay varios, dependiendo del momento vital en el que lo lees y las circunstancias que rodean o motivan la lectura», comenta. Pero si se trata de destacar solo uno, menciona Historia de un idiota contada por él mismo de Félix de Azúa, que leyó durante la carrera mientras cursaba una asignatura optativa (10 pensaments crítics) de la que el autor era el profesor.

Jaume Carot, rector de la UIB, descubrió de la mano de su hermano mayor Cien años de soledad, de Gabriel García Márquez, «en un tiempo en que el acceso a la información no era tan fácil como ahora y menos en un pueblo como el que vivía», recuerda. «Es el primer contacto con el realismo mágico y me permitió hacer volar la imaginación cuando era un adolescente. Lo he leído tres veces, por primera vez a los 12-13 años», añade.

La neurocientífica Nazareth Castellanos menciona un libro relativamente reciente, El infinito en un junco, de Irene Vallejo, que compró por recomendación de su librero. ¿Por qué es especial para ella? «Por la erudición y dulzura que emanan sus líneas, por recordarnos que los libros esculpen al ser humano y a la sociedad. Por invitarnos a recuperar la importancia de la belleza, la elegancia y el conocimiento», afirma.

La elección del obispo de Mallorca, Sebastià Taltavull, también se remonta a su adolescencia. Su libro es Documentos del Concilio Vaticano II, por ser su «libro de referencia, de cabecera», y que «siempre» consulta. «Es una hoja de ruta, ya que representa la renovación de la Iglesia y el diálogo con la sociedad y el mundo contemporáneo», señala.

El futbolista Abdón Prats tira para la tierra propia y reseña Nunca renuncies a ser feliz, el primer libro del mentor manacorí Joan Gallardo, en el que reflexiona sobre la felicidad, el conocimiento, el trabajo interior, el estudio filosófico y la experiencia personal y profesional.

El alcalde de Palma, Jaime Martínez, tiene dos libros de referencia. El primero es Arte, de Yasmina Reza, porque «a partir de un cuadro en blanco se cuestionan muchos principios y valores». Y el segundo, El libro de las bestias, de Ramon Llull, que «se lo recomendaría a cualquier persona que quiera dedicarse a la política».

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