Sóller paraliza la reforma de Ses Escolàpies y renuncia a 2 millones de ayudas europeas

El Ayuntamiento asegura que la ejecución el proyecto no es posible debido a los imprevistos que han surgido

Una imagen del estado actual del edificio de Ses Escolàpies de Sóller.

Una imagen del estado actual del edificio de Ses Escolàpies de Sóller. / J.Mora

El ayuntamiento de Sóller ha anunciado este miércoles que rescindirá el contrato a la empresa que ejecuta la reforma del casal de Ses Escolàpies y que renunciará a los dos millones de euros en ayudas europeas que servían para su financiación. El Consistorio esgrime la imposibilidad de llevar a cabo el proyecto por los imprevistos que han surgido en una obra que, desde hace semanas, prácticamente está paralizada.

El alcalde de Sóller, Miquel Nadal, junto con varios ediles del equipo de gobierno, ha anunciado la resolución del contrato con la empresa constructora y con el equipo técnico que supervisaba la reforma del edificio tras haber mantenido el día anterior una reunión con ellos. El concejal de Patrimonio, Juan Antonio Lorente, asegura que informes técnicos elaborados tras el inicio de las obras hacen «inviable» la consecución del proyecto de reforma tal y como se había concebido en un principio. Según ha revelado, se han detectado «imprevistos» y «vicios ocultos» como deficiencias estructurales que implican «modificar el proyecto de reforma», algo que según aseveró «no se puede hacer». Lorente reconoce que estos «vicios ocultos» no fueron detectados cuando se elaboró el proyecto, algo que atribuye al hecho de que «al ser un edificio antiguo siempre salen problemas imprevistos».

Por eso, el Ayuntamiento prevé paralizar las obras formalmente, rescindir los contratos e iniciar la redacción de un nuevo proyecto de reforma del edificio que «estará más adaptado a la realidad» y que incluirá «los refuerzos estructurales» que necesita el edificio. Lorente ha comentado que elementos como jácenas, columnas o dinteles de ventanas serán reforzados tras comprobar su mal estado de conservación y atendiendo al principio de que «es un edificio que alberga muchos niños».

El edil de Infraestructuras, Carlos Darder, ha añadido que la decisión se toma por «responsabilidad» y que los técnicos «se ponen a trabajar ya para hacer una reforma que será más funcional y de refuerzo estructural». Así, ha comentado que la financiación de la futura reforma se financiará con recursos propios del Ayuntamiento vía superávit municipal, del que ha dicho que «muy pronto se conocerá a cuánto asciende» para habilitar la partida que será necesaria para afrontar la reforma. 

El Ayuntamiento reconoce que las obras, pese a que se les dará prioridad, no estarán concluidas en septiembre y que la fecha todavía no se conoce. Lo que sí ha añadido el alcalde es que la reforma será «mejor que el proyecto que ahora paralizamos» y ha asumido su «compromiso de acabar la reforma del casal».

El proyecto al que renuncia el ayuntamiento de Sóller suponía la ejecución de una reforma valorada en 2,7 millones de euros, de los que dos millones procedían de los fondos europeos Next Generation. El resto era aportación municipal. 

La reforma del casal fue impulsada durante la pasada legislatura por el anterior consistorio el cual preveía mejoras estructurales y de eficiencia energética. La obra debía estar terminada antes del próximo mes de septiembre, un calendario que ya no se cumplirá. De momento, se desconoce cuándo se retomará el proyecto.

El edificio de Ses Escolàpies acoge la Escuela Municipal de Música, la biblioteca, el archivo municipal, el Agrupament Escolta y otras entidades que forman parte del tejidos asociativo del municipio.