El Firó de Sóller, y por extensión todas las fiestas populares donde participaban hasta ahora, perderán las escopetas como uno de sus ingredientes más destacados.
La Delegación del Gobierno en las Illes Balears ha certificado al ayuntamiento de Sóller que a partir de este año las armas de caza no podrán tomar parte de la fiesta que el municipio celebra el segundo lunes del mes de mayo. La prohibición obedece a un cambio legislativo introducido en el Reglamento de Armas que prohíbe la utilización de armas de fuego en fiestas populares, incluso en las que hay recreaciones históricas como es el caso del Firó. El municipio ya ha comunicado a los colectivos del Firó que este año no podrán hacer uso de las armas de caza y sólo se podrán utilizar los trabucos y espingardas, unas armas históricas que emulan las que se utilizaban en la época.
En una reunión técnica celebrada en la sede de la Delegación en la que tomaron parte representantes del ayuntamiento de Sóller, la Policía Local y la Guardia Civil se abordó el uso de armas y pólvora en el Firó de Sóller. En esta reunión los técnicos de la Benemérita explicaron que desde el año 2020 el uso de escopetas está desterrado de las fiestas.
Se da la circunstancia que en los dos últimos años no se celebró el Firó debido a la pandemia y a las restricciones sanitarias vigentes en 2020 y 2021, por lo que hasta ahora el ayuntamiento no había cursado la solicitud para hacer uso de estas armas en la próxima fiesta.
34 escopetas
Con la decisión ya tomada, este año dejarán de participar en el Firó las 34 escopetas que sus titulares habían inscrito en un listado que había habilitado el ayuntamiento de Sóller. Con ello el Firó perderá el sonido de los cerca de 7.000 cartuchos de fogueo que disparaban estas armas. Sólo podrán participar los trece trabucos y las cuatro espingardas que tiene registrados.
Este jueves se celebrará una junta local de seguridad presidida por la delegada del Gobierno, Aina Calvo, para abordar cuestiones relacionadas con la seguridad del Firó.
