La ‘revetlla’ de transición, tal y como la ha denifido este miércoles el alcalde Virgilio Moreno, ha cumplido las expectativas y ha atraído a centenares de jóvenes con muchas ganas de marcha a pesar de las medidas de seguridad y los protocolos de acceso impuestos por los organizadores. Dos años después de la última marcha del Dimecres Bo, se notaba en el ambiente que había ganas de disfrutar de una velada en compañía de los amigos y amigas y el público ha respondido de forma masiva.
La experiencia de trasladar la marcha desde el centro de Inca a recintos cerrados, pero al aire libre, como el Quarter General Luque y la plaza de toros ha resultado satisfactoria y ambas localizaciones prácticamente han llenado los aforos máximos permitidos.
Sobre las 20 horas ya había mucho ambiente, principalmente en el antiguo cuartel, donde se habían agotado las 1.500 entradas para la fiesta, que cuenta con música en directo, foodtrucks y largas barras. Todo el patio de armas está lleno de mesas y sillas, aunque es cierto que la mayoría de asistentes, muchos de ellos con mascarilla, pero no todos, preferían estar de pie para bailar al ritmo de la música. Se cuenta con las actuaciones de Discovers, Peri, Joni Theas, T-Mark, Christian Mir, Pep Torrens &LMM y Bartoni.
En la plaza de toros el ambiente a última hora de la tarde era más calmado, con un público mucho más joven con ganas de moverse. Un DJ ponía el ritmo desde una alta tarima y, al igual que en el Quarter General Luque, la inmensa mayoría de mesas instaladas en el centro del foro permanecían vacías. Una serie de carteles recordaban las normas que obligaban a bailar con mascarilla y sin bebidas y levantarse solo para ir a la barra. Incluso se ha habilitado un pequeño espacio para los fumadores.
