El faro de Formentor se llenó este lunes de coches durante toda la jornada pese a las restricciones circulatorias para vehículos que se pusieron en marcha el pasado día 9 de julio. Un "problema de comunicación" con el Consell de Mallorca hizo que la Guardia Civil considerase que podía retirar la barrera provisional que impide el paso en temporada alta a los coches, según informaron fuentes de Delegación de Govern.

Sin embargo, continuaron explicando estas fuentes, el sistema definitivo del control del tráfico aún no se ha instalado, de tal forma que, por ahora, seguirá instalada esa barrera provisional.

El colapso circulatorio en el entorno del faro de Formentor que se vivió durante buena parte de la jornada por la afluencia de vehículos motivó que no circulasen los buses lanzadera que ha habilitado el Govern con salidas desde la nueva estación del Moll pollencí y la playa de Formentor.

A lo largo del día, las redes sociales se llenaron de comentarios críticos de usuarios denunciando la inexistencia de controles de acceso, lo que, protestaban, causaba colapsos circulatorios en este entorno idílico de la costa mallorquina.

El pasado día 9 de julio, entró en vigor la medida por la cual únicamente puede accederse hasta el faro en transporte público desde el Port de Pollença y la playa de Formentor entre las 10 y las 19 horas, a través del servicio de autobuses lanzadera. La medida estará en vigor hasta el 31 de agosto.

La limitación al paso de los vehículos fue consecuencia de los problemas de masificación que venía sufriendo este paraje en los últimos años. El Consell recordó en su día que la carretera llegaba a soportar una excesiva densidad de tráfico, con hasta 7.000 vehículos en un día. Las administraciones expusieron también los problemas de seguridad que generaba esta situación al tratarse de una carretera muy estrecha.